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Liberar la economía de Melilla

¿Quieren otro Plan de Desarrollo de Melilla, otro más? Pues que empiecen por lo fácil, lo que nuestra Sociedad para el Desarrollo de Melilla (SODEMEL) ya hizo, estudió y cuantificó -que yace, como el arpa, del rincón en el ángulo oscuro, de sus dueños, los políticos, olvidada- que, por citar solo un ejemplo, conviertan, siguiendo el plan económico que les entregamos, el Fuerte de Rostrogordo en un nuevo Club, lúdico deportivo, con socios. Y que los burócratas y políticos no metan sus manos en la gestión del Club.

En lo que respecta a un nuevo Plan de Desarrollo de Melilla, bastaría simplemente con el propósito y la puesta en práctica de un objetivo fundamental e imprescindible: liberar Melilla, conseguir que deje de ser una ciudad económicamente comunista (casi, casi todo es público en Melilla, hoy, y por lo tanto sin futuro económico y de prosperidad). Con eso, liberando la economía local, ayudando -en vez de dificultando- las iniciativas económicas locales, nacionales e internacionales, serían innecesarios más Planes de Desarrollo… que jamás se han puesto en práctica por Gobierno local alguno.

Otro ejemplo de las consecuencias de la falta de libertad, en otro ámbito geográfico. Dice Catherine Belton, autora del libro “Los hombres de Putin”, que la historia tiende a repetirse. La URSS cayó porque no hubo progresistas -políticos nuevos, distintos, jóvenes (de mentalidad) y modernos- lo que originó “que no pudiera competir militar y económicamente con Occidente bajo tal aislamiento”. “De nuevo sufriremos -en Rusia- el impacto de los embargos impuestos por la UE (750 millones de habitantes) y los EEUU (330 millones)”, como le pasó a la URSS, que terminó desapareciendo. “Gran parte de la élite rusa no está de acuerdo con la invasión de Ucrania… saben que Rusia está condenada si no se integra en la economía global, así que tratarán de sustituir a Putin”. ¿Cuándo? No se sabe, pero -esperemos- quizás no tardará mucho. Con Putin -con la ausencia de libertad- ni Rusia, ni Melilla, ni nadie, tiene futuro.

Por cierto, y para desconsuelo de los comunista españoles, “China nunca será una potencia dominante como lo fueron la URSS y EEUU”, asegura en el diario El Mundo Rana Mitter, profesor de Historia Moderna y Política China en Oxford. La URSS ya no existe y en los Estados Unidos, como ya señaló Milton Friedman en su gran libro “Libertad de elegir”, está acrecentándote las tendencias aliberales, tendencias que, de no corregirlas, le harán perder su hoy todavía posición de potencia dominante.

“Libertad de elegir” es el título del libro que el Premio Nobel de Economía en 1976 Milton Friedman, en colaboración con su esposa, Rose, publicó en 1979. En la Conclusión final del libro resalta que “hemos olvidado -ya entonces- la verdad básica de que la amenaza más grande a la libertad humana reside en la concentración de poder, sea en las manos del Estado o de cualquier otra persona o entidad. Nos hemos convencido -nos hemos dejado convencer- de que conceder poder, siempre que sea para buenos objetivos, no es arriesgado”, pero sí lo es, porque, como dice Friedman, “estamos reconociendo otra vez los peligros de una sociedad demasiado gobernada, estamos entendiendo que unos medios equivocados pueden desnaturalizar unos buenos objetivos, que la confianza en la libertad de los individuos para que controlen sus propias vidas de acuerdo con sus propios valores constituye el camino más seguro para alcanzar todo el potencial de una gran sociedad”.

La importancia del clima de opinión, es el título de otro de los capítulos del libro. “Nos acosan con normas, regulaciones, papeleo, formularios para rellenar que nos enloquecen a todos… Los ciudadanos son -somos- conscientes de la existencia de los impuestos -ese robo generalizado y legalizado, según la opinión de muchos, especialmente de los que se centran en el uso que se da a esos impuestos y en los resultados que padecemos los ciudadanos- , pero incluso la naturaleza oculta de la mayor parte de esos gravámenes -vía la burocracia- difumina esa consciencia”. La difumina, pero no la evita, como la experiencia nos demuestra una y otra vez.

Acabamos de tener otra monstruosa prueba del abuso de poder. “La sentencia firme de los ERE certifica un sistema de corrupción institucional … y acaba con la autoatribución de superioridad moral (ética) de la izquierda” (Ignacio Camacho en ABC, el miércoles). Fraude, o saqueo, de más de 680 millones de euros. El Mundo, 27/6: “El Supremo ratifica que el PSOE andaluz “consintió” el fraude. Confirma la pena de prisión para Griñán por el caso de los ERE y la inhabilitación de Chaves. Cárcel para cuatro ex consejeros. Discrepancias: Dos magistradas progresistas votaron para absolver por malversación a Griñán.. y Unanimidad: Los cinco miembros del tribunal ven prevaricación de los dos ex presidentes”.

Con los ERE secuestraron la libertad con dinero público. Lo sabemos todos, Pedro Sánchez incluido (aunque, mintiendo como siempre, declare lo contrario). El hombre -decía Sartre- está condenado a ser libre. Ese es el inmenso e insoportable daño causado por la izquierda andaluza. Pero, a pesar de tanto pesar, no me parecería mal que indultasen a Griñán, indudable culpable de haber privado de libertad a tantas personas, pero, no por ello menos indudablemente, otro ser humano condenado a ser libre.

Lo malo para el PSOE de Sánchez -hoy no hay otro PSOE- es que la condena del TS por los ERE aboca, durante todo un año largo electoral, a un calvario para el PSOE en las 133 causas pendientes, tras lo de los ERE. Ni siquiera un experto en la propaganda mentirosa como Pedro Sánchez podrá evitarlo, en una democracia imperfecta, como la de España, pero democracia al fin y al cabo.

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Enrique Bohórquez López-Dóriga

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