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El Gobierno local “contempla” el cierre de la actividad no esencial, pero confía en no tener que aplicarlo

El presidente de la Ciudad Autónoma, Eduardo de Castro (Foto CAM)

El Gobierno de Melilla “contempla” el cierre “total y absoluto” de todas las actividades que no sean esenciales, aunque confía en no tener que llegar a ese “escenario 3” en caso de que no mejore la situación epidemiológica, que el presidente regional, Eduardo de Castro, calificó ayer como “crítica”. En rueda de prensa, el consejero de Economía y Políticas Sociales, Mohamed Mohamed Mohand, competente en materia de Salud Pública, explicó que el paquete de medidas que la Ciudad Autónoma tiene previsto adoptar, “atendiendo a la proporcionalidad de la situación”, se divide en tres fases y Melilla ya ha superado las dos primeras.

En concreto, el primer escenario contemplaba el cierre de la hostelería y la suspensión de la generación de actividades y eventos públicos y privados de carácter cultural y social, y el segundo añadía el cierre de los establecimientos que generen la permanencia de personas.
El escenario tres consiste en el cierre de toda actividad que no sea esencial, una posibilidad que el Gobierno melillense no descarta, pero el consejero mostró la esperanza de que no sea necesario llegar a él, como ha tenido que hacer la Junta de Andalucía en Granada, algo que “seguro que lo agradece toda la actividad comercial de la ciudad”.
De Castro agregó, por su parte, que Melilla se encuentra “en la última estación antes del confinamiento”, como sucedió en marzo, y aseguró que las próximas semanas “son realmente cruciales”, de ahí la necesidad de controlar el virus y evitar el colapso sanitario, ya que eso es algo que la ciudad “no se puede permitir” porque “todo el mundo tiene derecho a una UCI” si la necesita.
“Tenemos que salvar vidas y hacer lo posible, no hay otra alternativa”, dijo De Castro para argumentar la necesidad de “bajar esa curva” de contagios que ahora “es una línea ascendente”, aunque “parece que se está consiguiendo reducir un poco”.
Ello, según el presidente melillense, ha hecho necesario tomar nuevas decisiones que, “muchas veces no son comprendidas” debido a que son “duras, dolorosas y afectan a todos los ciudadanos”, pero cuyo objetivo es frenar el contacto y el contagio, lo que requiere “ser muy contundentes” si no se quiere llegar al escenario de marzo.

Decreto
Además de las medidas incluidas en la Orden de la Consejería de Economía y Políticas Sociales, De Castro se refirió al decreto firmado por él que fue publicado este domingo en una edición extraordinaria del Boletín Oficial de Melilla (BOME), en el que se recoge la prórroga del confinamiento nocturno de 22.00 a 6.00 horas y el confinamiento perimetral.
Asimismo, se reduce de 6 a 3 el número de personas máximo en reuniones, salvo convivientes, por lo que De Castro puntualizó que no habrá problema con las familias cuyos miembros superen esa cifra, ya que “no se van a separar”, ni siquiera en el caso de que coincidan personas que conviven con otras que no, en cuyo caso el número máximo se queda en 6.
De Castro confió en que los casos de coronavirus que hay en Melilla, más de 1.800 activos actualmente, se vayan reduciendo con las medidas adoptadas, aunque recordó que “esta curva tiene picos y unas veces suben y otras bajan” los contagios, aunque “la tendencia se está estabilizando”.
No obstante, apuntó que, si se llega al mínimo requerido, “se podría levantar alguna de las restricciones”, como el confinamiento perimetral o el confinamiento nocturno, lo que requiere ir evaluando la efectividad de las medidas cada 15 días.
Asimismo, insistió en su llamamiento a la responsabilidad de los ciudadanos, a los que recordó que hay vidas en juego y que cualquiera podría necesitar en un momento dado una cama de UCI, e insistió en que el cumplimiento de las medidas es “la mejor herramienta” para conseguir el objetivo y evitar “llegar a otro escenario, que no deseamos, que es el 3, de confinación total”.

“Contundentes” con las sanciones

De Castro aseguró que el incumplimiento de las medidas adoptadas está siendo sancionado, como evidencian las más de 1.500 denuncias, cuya tramitación se está llevando a efecto aunque los procedimientos sancionadores sean lentos, al tiempo que ha dejado que serán “contundentes” en este sentido.
También avanzó que la Ciudad Autónoma, junto con la Delegación del Gobierno, ha tomado otro tipo de medidas de control del cumplimiento de la cuarentena por parte de los pacientes de coronavirus.

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Redacción

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