Las injurias y filtraciones del perfil delictivo Lisbeth Salander dieron lugar a diversas denuncias no solo en la ciudad, sino también ante la Policía Nacional (CNP) de Málaga. En estas investigaciones, el que apuntan que será el nuevo viceconsejero de Presidencia, Juan José Torreblanca, colaboró activamente dado que fue una de las víctimas del perfil delictivo. Sin embargo, cerró colaboraciones con los agentes cuando se enteró de que un inspector melillense de la Policía Nacional de Málaga habría filtrado a Salander una sentencia absolutoria que beneficiaba al padre de dicho mando policial, tras ser condenado en primera instancia por su gestión del ‘Caso Novolujo’. Juan José Torreblanca, una de las opciones a las que apuntaron a este diario fuentes de Populares en Libertad (PPL) para que pudiera ser el futuro viceconsejero de Presidencia, también aparece como uno de los colaboradores de la Policía Nacional en Málaga para desvelar quién o quiénes estaban detrás del perfil delictivo Lisbeth Salander.
Según revela el sumario de la pieza central de la bautizada como 'Operación Montecristo' a la que ha tenido acceso MELILLA HOY, en la que se investiga un delito de revelación de secretos a través del perfil Lisbeth Salander, Torreblanca habría sido una de las víctimas de este perfil, motivo por el que colaboraba con un agente de la Brigada de Investigación Telemática de la Policía Nacional de Málaga.
Según relató Torreblanca en una declaración ante la UOJP, el actual presidente de Populares en Libertad (PPL), Ignacio Velázquez, le habría facilitado un perfil en Facebook denominado 'Miguel Molina' para "sondear los distintos grupos donde Lisbeth publicaba y extraer de ellos capturas de sus publicaciones".
Fue usando este perfil cuando contactó con otra de las afectadas por Salander, Juani M. quien ya había iniciado su propia investigación y colaboraba con un agente de la mencionada Brigada. Así, una de las veces que Torreblanca se trasladó hasta Málaga, se citó con uno de los agentes que investigaba el caso y le dio los datos con los que hasta ahora contaba. Se trataba de las sospechas que recaían sobre María Nieves Verdú, Isabel Sanmartín, Francisco Javier Castro y Teresa Belén Vázquez, cuatro de las cinco personas que posteriormente fueron detenidas – junto al “informático” Juan Félix y el matrimonio formado por Sergio Jiménez y Marisa Palacios- y que se encuentran en calidad de investigados por presunta revelación de secretos.
‘Caso Novolujo’
Tras varios meses de colaboración, en noviembre de 2014 el perfil delictivo publica un post con una sentencia absolutoria de un mando implicado en el ‘Caso Novolujo’, que sería el padre del coordinador de la unidad que investigaba Salander en la Policía Nacional de Málaga.
Según la declaración de Torreblanca, quien presuntamente habría filtrado esta sentencia a Salander sería el hijo del mando absuelto, inspector de la unidad que estaba investigando quiénes presuntamente estarían detrás de Salander. Este fue le motivo por el que Torreblanca traslada su "indignación" al agente de la Brigada de Málaga con el que llevaba meses colaborando y quien le confirma a través de la aplicación de mensajes de móviles Telegram que ha sido su jefe quien habría trasladado a Lisbeth Salander dicha sentencia. Este fue el motivo por el que Torreblanca, dado que los hechos ocurridos "no se ajustaban a la ortodoxia que cree que debía preservarse en la investigación en la que colaboraba", decide "apartarse poco a poco de dicha colaboración".
En las conversaciones entre el agente y Torreblanca se ve como el inspector le traslada el correo al agente para que lo investigue. Sin embargo, éste asegura que con ese correo no es posible y muestra a Torreblanca su "cabreo" con su superior.
‘Serpico’ una herramienta de la CNP
La investigación de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial (UOPJ) correspondiente a la Comandancia de la Guardia Civil de Melilla, revela a raíz de la declaración de Torreblanca, que la Brigada de Investigación Telemática del Cuerpo Nacional de la Policía (CNP) en Málaga habría estado relacionado con la “creación y gestión” de la Comunidad ‘Serpico Melilla’, así como de sus actividades. Y es que según confirma Torreblanca, en un inicio dicha comunidad era un pseudónimo bajo el que él mismo rastreaba a Salander y se llamaba ‘Frank Serpico’. Ante las publicaciones que Torreblanca hacia a través de este perfil Salander reaccionaba, por lo que cuando lo cerraron, el agente que colaboraba con Torreblanca consideró como una buena herramienta para seguir descubriendo datos sobre Salander.
