“Mejorando la fiscalidad, abaratando los transportes de mercancías y mejorando las actuales Reglas de origen se conseguiría la implantación de industrias de transformación de materias primas o productos semiterminados procedentes de terceros países”.
3.- Transporte y turismo
Se necesita abaratar el transporte de los no residentes si queremos que lleguen turistas a nuestra Ciudad. Actualmente, salvo ofertas de las compañías o se reserven con mucha antelación un vuelo de ida/vuelta a Madrid cuesta más de 700 euros, desde Málaga unos 500 euros o desde Sevilla incluidos en la OSP más de 600 euros. Los residentes, a pesar de la subida del 50 al 75% de bonificación seguimos pagando lo mismo o más que antes pues las compañías han subido los precios.
En el transporte marítimo para residentes, solo se ofertan 200 plazas a los precios máximos fijados en el Contrato de “Gestión de servicios de las líneas marítimas de interés público Málaga-Melilla, Almería-Melilla y Motril-Melilla” y con precios superiores al anterior. Habría que modificar el mismo si queremos que vengan turistas a Melilla
Se necesita ampliar la pista del aeropuerto y su clasificación como 3C que posibilite el aterrizaje y despegue de aparatos tipo A320 a plena capacidad de carga para poder hacer rentables los vuelos, abaratar los precios de los pasajes y operar más destinos directos. Y si no fuera posible la ampliación, al menos, se debería trabajar para publicar una RNAV que sobrevolara el mar como la actual VOR, sin necesidad de depender de la aprobación del país vecino. Sin esto, no hay posibilidad de captar más turismo.
Se necesita ampliar la infraestructura hotelera de nuestra Ciudad, pudiéndose retomar la construcción de un nuevo Parador o facilitar la colaboración público privada en el desarrollo de un “resort” en las antiguas instalaciones militares del Acuartelamiento del Laureado Regimiento Alcántara nº 10 en primera línea de playa o facilitarlo en cualquier otro edificio histórico en desuso.
En cuanto al transporte marítimo de mercancías llevamos 4 años esperando el desarrollo de un RD que permita la aplicación de las bonificaciones previstas para el transporte de mercancías incluidas en los PGE desde 2017 con aplicación retroactiva desde 2016. En marzo de este año enviamos a la D. Gral. de Marina Mercante nuestra propuesta para desarrollo del RD necesario y sin haber recibido respuesta alguna hasta la fecha. Algo habitual en este Gobierno.
Se necesita empezar la ya aprobada construcción de un dique para grandes esloras y poder cerrar el acuerdo con una de las mayores navieras de cruceros que garantice la llegada de cruceros de forma continuada.
Se podría incluir en los Fondos Next Generation la puesta en marcha de la ampliación exterior del Puerto de Melilla que contaba con fondos plurianuales en los PGR 2018 y se retiraron en los de 2020 por el actual Gobierno. Si no como instalación portuaria al uso, como un terreno ganado al mar para instalar industrias ligeras de transformación.
Para todas estas inversiones y ayudas al transporte se deberían solicitar las asignadas a las regiones ultraperiféricas por la Unión Europea. Melilla y Ceuta son regiones extra peninsulares, a las que no es aplicable la condición de insularidad – “estricto sensu”- pero a las que la propia Comisión Europea, en determinadas ocasiones, ha reconocido sus dificultades análogas a las de las regiones insulares. Así, el artículo 2, d) del Reglamento 3577/92 del Consejo de 7 de diciembre de 1.992 manifiesta que “Ceuta y Melilla serán tratadas de la misma manera que los puertos de las islas”.
4.- Alternativas al comercio fronterizo
Sin renunciar al derecho que tenemos a seguir comerciando con nuestros vecinos con exportaciones documentadas ante la Aduana y con un acuerdo de un “régimen de viajeros” para lo que no se deban considerar expediciones comerciales, se necesitan crear nuevas actividades empresariales. Para ello, se deberían seguir las propuestas recogidas en el Plan estratégico de Melilla 20-29 ya iniciado hace unos meses.
Fundamentalmente, se deben potenciar la rehabilitación energética y la de inmuebles clasificados como BIC o dentro del Entorno BIC que es un patrimonio urbanístico excepcional. La construcción y la obra pública son motores de la economía y crean puestos de trabajo directos.
Para ello, se requiere un esfuerzo importante en formación en oficios (albañiles, fontaneros, electricistas, fontaneros, instaladores de aparatos de climatización, pintores, etc.) que actualmente no están al alcance de la población joven de nuestra Ciudad y que representan el porcentaje de parados más alto de toda la Unión Europea. Se han perdido los 5,7 millones de euros de Fondos destinados por SEPE para la formación de desempleados en los dos últimos años por una mala gestión de la Dirección provincial de dicho organismo.
Se deberían potenciar la creación de empresas de servicios digitales aprovechando las buenas infraestructuras de comunicación digital existentes y la atractiva imposición fiscal sobre los mismos.
Para ello, se necesitaría una inmersión lingüística práctica en idiomas que faciliten el acceso a puestos de trabajo relacionados con el turismo (hostelería, agencias viajes, guías turísticos, etc.) y con empresas de servicios telemáticos y relacionadas con las nuevas tecnologías.
Mejorando la fiscalidad, abaratando los transportes de mercancías y mejorando las actuales Reglas de origen se podría conseguir la implantación de industrias de transformación de materias primas o productos semiterminados procedentes de terceros países.
5.- Inversiones públicas
La primera, debe ser la incrementar las plantillas fijas de las FCSE por razones obvias y la adecuación tecnológica del paso fronterizo de Beni-Enzar a los requerimientos del control documental en la frontera Sur de Europa, sin que ello implique necesariamente tener que renunciar a la actual exención de visado a los vecinos de la provincia de Nador. Somos partidarios de la presencia de FRONTEX en Melilla, como ya está presente en Ceuta. Ya no se van a volver a producir la entrada de las treinta mil personas que llegaban a diario al haberse acabado el famoso comercio fronterizo y, por tanto, se podrá seguir aplicando al pequeño tráfico fronterizo en el horario de 08 a 20h sin posibilidad de pernoctar tal como se diseñó en su momento y así está establecido. Para ello, es fundamental la implantación del Sistema de Entradas y Salidas (SES) de la Unión Europea.
Incremento de la oferta universitaria con más especialidades o nuevas Facultades y adecuación de la FP a las necesidades de los oficios demandados por las empresas locales o de la Península y potenciar la FP DUAL con nuevos módulos, aunque no haya tejido empresarial suficiente para ello en estos momentos y que se puedan realizar las prácticas fuera de Melilla tal y como se hace con las curriculares de algunos grados universitarios.
Cesión de los terrenos de antiguas instalaciones militares para fines educativos o turísticos.
Analizar desde ya el uso que se va dar al actual Hospital Comarcal cuando se inaugure el nuevo Hospital Universitario que entendemos debe dotarse de más efectivos humanos (médicos en diversas especialidades, ATS, auxiliares de enfermería, etc.) de forma inmediata. Melilla no puede permitirse perder las actuales camas del Comarcal para atender urgencias sanitarias como hemos podido comprobar con la pandemia. Se podría establecer un convenio con el Mº de Sanidad de Marruecos para dar servicios sanitarios mediante contraprestación a descontar de las ayudas que España y la UE conceden a dicho país asegurando de esta forma el cobro de las prestaciones realizadas y evitando el colapso que se venía produciendo al atender a nuestros vecinos que llegaban a sus puertas de forma demandando asistencia sanitaria de forma poco ortodoxa.
En los tres casos anteriores, el incremento de empleados públicos va a necesitar dotarlos de más incentivos para hacer atractiva la plaza y no solo por las remuneraciones sino con la duración de los contratos, la facilidad para acceder a una vivienda y la posibilidad de compatibilizar el servicio público con la actividad privada entre otras.
En cuanto a inversiones en infraestructuras ya hemos señalado algunas: ampliación del puerto, creación del dique para cruceros, mejora del aeropuerto, así como la adecuación de los puestos fronterizos a los requisitos de una frontera europea (el 22 de mayo próximo vence el plazo para ello) con la imprescindible presencia de FRONTEX y la necesaria participación de nuestros vecinos.
6.- Prejubilaciones
Ante la indiscutible brutal bajada de la actividad comercial tras el cierre de la aduana comercial en agosto de 2018 y el cierre fronterizo total desde el inicio de la pandemia y ante la más que posible no recuperación de los niveles anteriores muchas empresas se van a ver en la necesidad de ajustar sus plantillas si no lo han hecho ya.
Proponemos se articulen medidas excepcionales para poder prejubilar a los trabajadores mayores de 55 años (como en el Régimen del Mar) siempre que hayan cumplido los años de cotización que se establezcan. Ello conllevaría una reducción de los costes directos que permitirían a las empresas afrontar la recuperación con mayor desahogo y antes de tener que adoptar otras medidas más drásticas y con un mayor coste de indemnización por fin de contrato.
Por otra parte, permitiría la contratación de jóvenes que actualmente alcanza la tasa de desempleo más alto de toda Europa.
7.- Aplicaciones del Tratado de Schengen
En cuanto a la eliminación de la actual exención de visado a los residentes de Nador y Tetuán aún no tenemos postura definitiva. Estamos a favor de la eliminación del “visado múltiple” para el resto de marroquíes no residentes en dichas provincias. Ello equipararía nuestra excepcionalidad con la prevista en el Reglamento 1931/2006 de la CE sobre tráfico fronterizo menor en las fronteras terrestres exteriores de los Estados miembros.
En principio, creemos que se podría mantener la exención de visado a los marroquíes de las provincias de Nador y Tetuán hasta ver la postura de Marruecos cuando se reabra la frontera y siempre que se vuelva a permitir el paso de mercancías de exportación documentadas y el pequeño tráfico fronterizo -no el de los bultos a través de Barrio Chino- por las personas que vengan a la Ciudad como pasaba cuando se permitió esta exención de visado hace ya 30 años. Por otra parte, ni España ni la UE deben consentir que Marruecos impida el tránsito de turistas europeos a través de Ceuta y Melilla como ha anunciado. Unas relaciones de buena vecindad no pueden ser asimétricas, sino que deben basarse en el respeto mutuo.
En ambos casos, se requiere el doble control documental en la frontera y a la hora de embarcar hacia la Península que tampoco es que ello suponga una molestia excesiva a los ciudadanos melillenses y sin que ese control desvirtúe en modo alguno nuestra inserción en el Territorio Schengen. Esto nada tiene que ver con el control de los equipajes a la llegada a la Península que es un tema de control aduanero. No sigan confundiendo a los ciudadanos.
Se debería establecer una reforma legislativa para evitar el acceso a la nacionalidad española de extranjeros por el mero hecho de haber nacido en Melilla o llevar 10 años de forma legal en la Ciudad para evitar el crecimiento de la población marroquí en nuestra Ciudades pues de sobra es conocido las irregularidades que se dan en estos casos. Incrementar la actuación de las FCSE para localizar y expulsar de la Ciudad a los extranjeros que residen en ella de forma irregular.
La Unión Europea -y España, obviamente- tienen a Marruecos como país “amigo” por muchas razones y mantienen un trato muy favorable en las relaciones económicas entre ambas partes. A ambas partes, nos interesa que Marruecos se desarrolle económicamente pues es mejor tener un vecino estable -social, económica y políticamente- que un polvorín que pueda estallar como otros países de influencia islámica.
Las inversiones y ayudas que recibe Marruecos desde los distintos Gobiernos europeos, la propia Comisión Europea e inversiones de las empresas europeas se cuantifican en miles de millones de euros. A cambio, se le pide respeto a los Derechos Humanos, el control de los flujos migratorios hacia Europa, seguridad jurídica y el cumplimiento de los acuerdos suscritos.
A la vista de los acontecimientos -no sólo de los recientes acaecidos en Ceuta- Europa se ha dado cuenta que hay que exigirle a Marruecos que cumpla sus compromisos y se olvide de sus ansias anexionistas sobre las Ciudades Autónomas de Ceuta y Melilla y le invita a crear una zona de prosperidad compartida.
Entendemos que nuestras propuestas no sean compartidas por algunos, pero es nuestra obligación plantear la relación de medidas concretas. Por último, pedimos como siempre altura de miras a todas las fuerzas políticas y que trabajen conjuntamente por nuestra Ciudad. Sin consenso, nada será posible.
