El encuentro que iban a mantener en Madrid una representación de los partidos de la oposición con dirigentes del PP y PSOE, parecía el principal eje de actualidad de la crisis política que vivía la Ciudad Autónoma en esas fechas. Frente al mutismo al respecto que guardaban el PSOE y el PP, desde el gobierno local no se dejaba de censurar que dirigentes nacionales del PP se negaran a responder los faxes que había remitido el presidente de la Ciudad, Mustafa Aberchán, y, en cambio, "sí estaban dispuesto a mantener una reunión con tránsfugas". Por otra parte, a través del doctor José Luis García Puche, la AECC y el Hospital Comarcal advertían del peligro del tabaquismo, porque aseguraban que "unos 300 melillenses desarrollaban cada año algún tipo de cáncer a causa del consumo de tabaco".