Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

Miles de olvidados y muertos

terremoto 2

Ayer, miércoles, leo en un periódico nacional: “casi tres mil muertos y cuatro días después (del terremoto) Mohamed VI se acerca a su pueblo, con toda la parafernalia habitual en su caso, alfombras, uniformes de gala, alejamiento de la prensa, despliegue policial, etc.”

Había leído previamente, también en la prensa nacional: “un devastador terremoto ha puesto a prueba el régimen marroquí”. Un país, Marruecos, que es una potencia turística, aunque un 40% de su población aún vive del campo. Un país del que España -aunque pueda no parecerlo, dado el trato que a España dedica ‘Su Alta Majestad’ marroquí- es su socio principal, con el 37% de exportaciones totales desde la UE.

Mohamed VI, cuando se produjo el terrible terremoto, estaba en Francia, de vacaciones, según algunos informes, en algunas de sus residencias francesas, como el castillo de Betz o en su suntuoso hotel particular de más de mil metros cuadrados y próximo a la Torre Eiffel. Los medios oficiales marroquíes no comenzaron a reaccionar hasta dieciocho horas después del inicio del terremoto, con un comunicado distribuido por la agencia oficial que empezaba así: “Bajo las Altas Instrucciones de Su Majestad el Rey Mohamed VI, Jefe Supremo…”. Mohamed VI, por cierto, es el quinto monarca más rico del mundo, según Forbes, con una fortuna personal evaluada entre 6.000 y 8.000 millones de dólares.

El problema del poder absoluto -como en Marruecos- es que cuando tal poder está ausente-como es habitual en Mohamed VI- el vacío es total. Sin las ‘Altas Instrucciones’ de SM, hasta la ayuda internacional llega tarde y quizás muchas personas hayan muerto entre los escombros, por esa tardanza.

JM Nieto definía muy inteligentemente la situación en su ilustración del martes en ABC: dos trabajadores marroquíes están limpiando escombros caídos; uno de ellos le dice al otro: “Yo estoy con lo más urgente, hay que limpiar de escombros un pasillo para que el Rey no se manche la chilaba si visita este pueblo”. Esa ilustración define, mejor que muchos artículos, la situación real (o Real) del Marruecos de hoy.

Las víctimas del seísmo, varios miles indeterminados, son los olvidados de un Marruecos que antes de la tragedia los tenía en un segundo plano, resumía el diario ABC del martes. Los tenía antes, los tiene ahora y… el futuro no está escrito, pero pinta más bien negro para esos olvidados.

 

Liberalizar la economía y leer más

Quien controla el presente, controla el pasado y quien controla el pasado controlará el futuro (Orwell). Es harto positivo recordar, por ejemplo, el “Milagro Económico Español” del período 1959-1973, con la liberalización de la economía (lo que tanto necesita Melilla).

En nuestro Semanario QUEZ del domingo, se analizaba la inversión de la empresa (estatal) Saudí Telecom en Telefónica: “Imponer medi­das proteccionistas en casa mientras se espera una actitud abierta en los países donde operan estas empresas no es coherente. Argu­mentar que Arabia Saudí no es una democracia mientras se celebran trans­acciones comerciales con países como Cuba, Irán o Venezuela parece hipócrita. Forta­lecer las relaciones empre­sariales con Arabia Saudí debería ser una prioridad, al igual que desarrollar vín­culos comerciales con diversas economías en todo el mundo…El proteccionismo y la autarquía solo condu­cen al estancamiento y al retraso económico”.

Hay otras razones, además de las económicas, para estar de acuerdo con la inversión de la compañía saudí en Telefónica. Por ejemplo, que la comunista Yolanda Díaz, cochambrosa vicepresidenta de nuestro Gobierno, se haya manifestado en contra. También hay razones en contra de la inversión saudí, como la sospecha -basada en hechos pasados- de la existencia de ‘mordidas’ para ‘suavizar’ políticamente la operación.

Leer más. Presentado, el martes, en la UNED, el libro ‘Destripando el Derecho’, del positivamente sorprendente escritor y juez decano de Melilla, Fernando Portillo. Diálogo entre el autor y el director de la UNED, Ángel Castro, y varias preguntas de los asistentes, inteligentes e incluso graciosas, como la de mi amigo Saturnino sobre si los jueces son, o no, dioses. Yo pregunté acerca del grado de acierto, en la España de hoy, de la frase ‘solo la inseguridad jurídica era segura’ en años pretéritos de nuestra historia. Fernando Portillo resaltó que una Justicia lenta sí provoca inseguridad y confirmó su personal valía. Por cierto, él no se considera Dios.

 

Posdata

Me ha maravillado la Escuela de Arte Miguel Marmolejo de nuestra ciudad. Me ha impresionado la calidad de su directora, Bárbara Judel, y el nivel y la actitud de todos los que vimos allí, alumnos incluidos. Así sí se puede lograr una Melilla mejor.

Loading

Enrique Bohórquez López-Dóriga

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€