Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

La Semana| La otra España

Aunque el aparato propagandístico de Pinocho “el ilusionista” Sánchez  (ilusionista porque desaparece cuando las cosas van mal y vuelve a aparecer cuando cree que hay alguna noticia o acontecimiento  positivo del que se pueda apropiar) nos venda motos constantemente, nos prometa que “nadie se va a quedar atrás”, nos anuncie leyes para tener unos alquileres más baratos, nos augure mejores condiciones de vida y mayores libertades para todos (luego quiere controlar el poder judicial, los medios de comunicación y nuestra economía vía impuestos crecientes, que hacen que él use nuestro dinero en vez de nosotros), nos prometa que no va a pactar con los nacionalistas `para descomponer España (luego le puede el interés de mantener el sillón y les da todo lo que les puede dar) o, como hicieron los nazis en su día, busque enemigos donde no los hay para que los ciudadanos estén pendientes de otra cosa y no se den cuenta de que cada vez hay más paro, menos libertad y más impuestos; aunque él y sus adláteres hagan todo lo anterior, hay otra España.

Sí, hay otra España que no espera nada de nuestros actuales gobernantes social-comunistas, que se levanta cada mañana para sacar adelante su negocio (con inspecciones, impuestos crecientes, restricciones por el covid y ayudas nimias) y que no quiere saber nada de los tejemanejes de Sánchez. Este fin de semana estuve en Cuenca haciendo deportes de aventura (hicimos rafting y barranquismo, aunque se pueden hacer muchas más actividades) y descubriendo una ciudad de la “España olvidada” que me ha impresionado. Borja, el monitor con el que hicimos las actividades es un buscavidas que vive lo que hace y que compagina la organización de escapadas para hacer deportes de aventuras, con la docencia de estas actividades y que fue antes, en Madrid, camarero, organizador de eventos y muchas cosas más. Hay, en Cuenca y en muchísimos lugares de España, otra España que, pese a Sánchez y los suyos, sobrevive, saldrá adelante luchando mucho y no espera nada bueno de nuestro gobierno (más bien trabas y palos en las ruedas). Reconforta pensar que Sánchez pasará, esperemos que pronto, pero que la gran mayoría podremos salir adelante con mucho trabajo y mucha ilusión, como Borja, los muchos restaurantes de Cuenca o todas las empresas o autónomos de España. Dentro de poco Sánchez y sus facinerosos y el covid serán virus pasados.

Formación de los políticos. Listas abiertas.

¿Por qué para ejercer de médico, enfermera/o, profesor, arquitecto, contable, abogado, etc. se debe tener unos estudios y para ejercer de político no? ¿Es acaso menos importante para la sociedad la labor de los políticos?¿No debería un político tener unos estudios mínimos o, en su defecto, una experiencia demostrada en algún campo de la actividad pública o privada?¿Qué formación mínima debería tener un político que nos vaya a representar?

Muchos nos hacemos estas preguntas y parecería lógico, teniendo en cuenta que los políticos tratan temas muy importantes que marcan nuestras vidas y nuestras haciendas, que tuvieran unos conocimientos mínimos de su área y alguna experiencia anterior. Tener una carrera  y una amplia experiencia en el mundo laboral (si no pudiesen ser ambas cosas, sería mejor que el político tuviera la experiencia y si es en el sector privado, mejor) debería ser obligatorio para todos los políticos. Así se evitaría la gran cantidad de políticos que están para servirse y no para servir (que es la función de un político), que no tienen conocimientos o capacidad para desarrollar sus funciones (aunque cobran) y que la política sea un último recurso para ganarse la vida de personas que, por su falta de formación o inutilidad, no hubiesen podido trabajar en otro lugar.

Reclamo desde aquí que se instauren las listas abiertas para todas las elecciones. ¿Por qué tenemos que votar, como borregos, a una lista con un orden con el que, en muchos casos, no estamos de acuerdo? Los ciudadanos queremos poder votar/elegir a los futuros políticos que, por su formación, talante o experiencia,  nos resuelvan los problemas. No queremos personas “de relleno” o que están como pago de favores anteriores. Si podemos elegir a las personas (no una lista), el político elegido se cuidará muy mucho de cumplir con lo prometido o no repetirá. Ahora sólo les interesa quedar bien con quien les pone en la lista…

Loading

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€