La Asamblea de Melilla guardó ayer un minuto de silencio por las dos últimas víctimas de violencia machista, una mujer de nacionalidad británica residente en España y otra mujer “terriblemente asesinada” en Huéscar (Granada).
Antes del inicio del Pleno de la Asamblea celebrado ayer, el presidente de la Cámara, Juan José Imbroda, propuso a los diputados guardar este minuto de silencio como muestra de la condena de la Cámara a la violencia de género, así como de solidaridad y condolencias a sus respectivas familias.
La Asamblea de Melilla hará llegar su pésame a los municipios de residencia de ambas víctimas.