La Guardia Civil y la Policía Nacional llevaron ayer a cabo una nueva actuación para localizar a inmigrantes magrebíes que buscan colarse en el barco para viajar a la península como polizones. Desde bien entrada la tarde-noche, agentes de los dos cuerpos de seguridad rastrearon las escolleras del puerto y Melilla La Vieja, donde localizaron a una decenas de magrebíes -la cifra exacta no pudo ser facilitada porque la operación seguía en marcha-, prácticamente todos menores de edad indocumentados. La asociación Prodein habló de "redada generalizada de menores y mayores en este momento".
La actuación de ayer, a diferencia de otras que se realizan periódicamente, no se hizo a primeras horas de la mañana sino por la noche, para pillar desprevenidos a los inmigrantes. Así decenas de agentes de la Guardia Civil y Policía Nacional rastrearon las zonas por las que se suelen situar los inmigrantes que aspiran a ir de polizones a la Península, colándose en algunos de los barcos que enlazan Melilla con Málaga, Almería o Motril (Granada). La intervención se enmarca en un operativo permanente en la zona que tiene como objetivo evitar que los asentamientos de estos inmigrantes, que suelen ser de nacionalidad marroquí o argelina, se convierta en permanente. Los menores fueron entregados a la Policía Local para su puesta a disposición de la Consejería de Bienestar Social, mientras que a los adultos se les aplicó la Ley de Extranjería y fueron trasladados a la Jefatura Superior de Policía para su expulsión.