Ahora, cuando se acerca el invierno de mi vida y las cumbres de mi cuerpo se cubren de nieve, me dispongo a reconocer todo aquello que me dio forma a mi existencia.
Mi Patria, mi familia, mi trabajo y mis amigos. Este mi pequeño homenaje lo dedico a la Melilla de España y a mi Regimiento de Artillería nº 32 en su 125 cumpleaños.
Todos los miembros de mi familia hemos pertenecido históricamente a la Real Arma de Artillería, nuestro escudo indica que hemos de acudir prestos a la defensa de su majestad o sea "POR PIERNAS", la fidelidad nos define.
Allá , cuando corría el año 1859, un cañón, el caminante, hacía los disparos que servirían para delimitar definitivamente la frontera entre España y Marruecos en el territorio' de Melilla, al poco tiempo, mi bisabuelo Francisco, quedó sepultado por un desprendimiento en las minas de la UNION, es muy probable, que invocara a Santa Bárbara, fue liberado y se trasladó a Melilla, su hijo, también Francisco, consumió su vida como agrimensor de las minas de Setolazar, entre la pólvora y el trueno de aquellos que invocan a Santa Bárbara, uno de sus hijos, mi padre Alfonso, tras una penosa marcha de 1000 kilómetros llegó a las lejanas tierras que circundan el lago Ladoga, allí, honró a su patria en la 250 División cosechando condecoraciones españolas y alemanas, fue voluntario, nadie le obligó y como el decía: fui a defender las fronteras de Europa para conseguir la libertad de Polonia, Estonia, Lituania, Alemania y otras, pasó el tiempo y todo esto ocurrió, su predicción llegó mas allá de su muerte, le acompañó su primo Alfonso, Artillero del Rgto. N9.9 de Melilla y que murió siendo Coronel. Después, nacimos mis hermanos y yo, a mi hermano Alfonso le arrebató un dedo el cierre de un cañón, Antonio sirvió en Artillería y yo tras muchos años de vestir el uniforme entregué el testigo a mi hijo Daniel, hoy destinado en el Regimiento, junto a su mujer María de la Paz, los dos son Suboficiales.
Por todo esto y por todo lo que está por venir me satisface decir que somos parte de a herencia de aquellos 17 Artilleros que llegaron a Melilla una tarde de Septiembre de 1497. Cuando me asomo a mi ventana y contemplo el Gurugú observo a sus pies la base Alfonso XIII.
De cuando en cuando, llegan hasta mí roncos sones de tambores y las voces de jóvenes Artilleros que lanzan al cielo cánticos y salvas en honor de Santa Bárbara, cañones que saludan a os héroes de España "Flomesta, Mas Fernández Herce, Guilache, Royo, de la Paz Orduña, Moyano, Planell y tantos y tantos otros que dieron su vida, también a los que ofrecieron su experiencia y saber, como el Maestro Mayor de la Artillería, Don Francisco Ramirez de Madrid, que atrevidamente reconoció el territorio de Melilla una vez terminada la toma de Granada junto al contador del Duque de Medina Sidonia, o a Don Miguel de Perea, que junto a Tadino de Martinengo terminó la hermosa Puerta de Santiago en 1540, y entre el mito y la leyenda el Cristo del Socorro tallado con las manos de un Capitán de Artillería que sufría castigo en el penal.
Una generación tras otra, ha venerado a este cristo, como también durante muchos años los melillenses rezaban el Angelus después de tronar el cañón de Ataque Seco a las doce del mediodía y que decir de mis compañeros, muchos de los cuales duermen el sueño de los Justos, los inmejorables Tovar, Belmonte, los simpáticos Saura, Angelillo y Garvín, Tortosa con su buen hacer y muchos que no nombro, no obstante no puedo dejar en el olvido a Eduardo de los Ríos y Herraiz conmigo excelentes compañeros a la que espero que Dios guarde durante muchos años y como no al que fue mi capitán y hoy es el actual ilmoSr.Coronel Jefe del Regimiento Mixto de Artillería 32 de Melilla Don Amos Paramio Pérez o bien a todos aquellos, que me acompañaron para fundar la Cofradía de Jesús Humillado en la Parroquia Castrense gentes con gran corazón como Diego Jesús Conesa Para y Antonio Alcaraz.
El Regimiento de Artillería 032 es centenario y rico en tradiciones, fue condecorado en el año 2010 con la medalla de Oro de la ciudad de Melilla y la ha impregnado a toda ella con su sello (Batería de la Muralla Real, Ataque Seco, Torreón del Bonete, Batería J, Parque de Artillería, GAAAL VII(M-1) todas Artilladas en su momento, y no solo a Melilla, síno al mismo corazón de España, donde lucen los airosos leones del Congreso realizados con nuestros cañones fundidos.
