La Guardia Civil ha detenido, en la localidad granadina de Castell de Ferro, al conductor de una furgoneta, de nacionalidad marroquí y residente en El Ejido (Almería), tras viajar en el barco de Melilla, tras ser sorprendido transportando 240 kilos de hachís ocultos en su vehículo, que fue interceptado después de que cometiera una infracción de tráfico, concretamente saltándose un semáforo. Los primeros resultados de la investigación apuntan a que la droga había sido adquirida en Melilla, desde donde había llegado a la península a través del puerto de Motril con destino alguna localidad de la provincia de Almería. La investigación se inició cuando una patrulla de Tráfico de la Guardia Civil de Granada, que prestaba servicio en la población de Calahonda, observó cómo una furgoneta de medianas dimensiones que transitaba por la carretera que une las provincias de Granada y Almería, no respetó un semáforo en rojo y continuó su camino.