Gracias a la colaboración de varios jugadores locales, los pequeños pudieron salir al Campo de Golf, tanto el sábado como el domingo, y seguir mejorando, a la vez, y casi más importante, que se divertían. La Federación Melillense de Golf, pese a la repentina marcha del profesor que estaba a cargo de las clases a alumnos de diferentes edades, no ha cesado su actividad durante el pasado fin de semana.
Así, los más perjudicados por esta circunstancia, ajena del todo a la entidad que preside Enrique Bohórquez, son los niños y niñas que aprenden y practican habitualmente este deporte en esta ciudad. Por fortuna, y gracias a la colaboración de varios jugadores locales, los pequeños pudieron salir al Campo de Golf, tanto el sábado como el domingo, y seguir mejorando, a la vez, y casi más importante, que se divertían.