Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

Los comedores escolares de Melilla no abrirán este verano por falta de niños

melillahoy.cibeles.net fotos 1605 comedores

Este verano los comedores escolares de Melilla no abrirán sus puertas. El motivo, que existe una nula demanda de plazas. De hecho, el pasado año hubo que cerrarlos a comienzos de agosto porque la asistencia de usuarios era prácticamente nula y el Ministerio decidió reinvertir la partida prevista para estos fines, en otros gastos derivados del inicio del curso escolar. Ni la Ciudad Autónoma ni el Ministerio han hecho reserva presupuestaria para que los comedores permanezcan abiertos durante la época estival. La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, instaba esta semana a un total de 62 municipios españoles de más de 100.000 habitantes, entre los que no se incluye Melilla, a que garanticen la alimentación de los menores de familias vulnerables, especialmente en las vacaciones de verano, mediante la fórmula que consideren más idónea: apertura de comedores escolares, distribución de tarjetas sociales o cheques para comprar alimentos, campamentos urbanos o catering.

El llamamiento de Becerril se suma a las campañas sociales que se vienen desarrollando en estos momentos a nivel nacional -como el anuncio televisivo de unos niños que beben leche aguada-, para que los pequeños de familias sin recursos puedan seguir recibiendo un plato de comida al día durante el periodo estival.

Pero en nuestra ciudad los comedores escolares deberán cerrarse este verano porque no hay niños que acudan. Así lo confirmaron ayer a este Diario distintas fuentes cercanas tanto al Ministerio de Educación como a la Ciudad Autónoma.

Melilla
El pasado verano se ofertaron 400 plazas en los comedores escolares del Colegio Mediterráneo, atendido por las Religiosas de María Inmaculada; el del Reyes Católicos atendido por Divina Infantita y el del León Solá. Pero a mediados de agosto tuvieron que cerrar porque apenas si la ocupación en el mes anterior había sido de 70 niños en total, cifra que decayó con la finalización de las colonias urbanas.

El año anterior, en 2014, pasó algo similar aunque entonces se ocuparon unas 160 plazas mensuales. Se había previsto un total de 400 plazas y un presupuesto, que no llegó a gastarse, de 120.000 euros.

En 2015 el Ministerio de Educación había previsto una partida de 90.000 euros para sufragar el mantenimiento de los comedores, pero sólo abonó diez mil, por lo que los 80.000 euros sobrantes se destinaron a otros gastos del inicio del curso escolar.

A la vista de estos resultados, este verano, ni el Ministerio ni la Ciudad Autónoma han previsto abrir los comedores, por lo que no se ha realizado una reserva presupuestaria. No obstante se apunta desde las fuentes consultadas, que si existiese demanda, es decir, que si hubiese familias que así lo demandaran antes de que termine el curso, se habilitarían las fórmulas necesarias para que estos menores pudieran seguir disfrutando de este servicio.

Polémica
En el verano de 2015 el cierre de los comedores fue motivo de polémica y enfrentamiento entre los grupos políticos de la oposición y la Dirección Provincial de Educación, hasta el punto que se acusó al MECD de no haber informado a los padres y de que había familias necesitadas que se habían quedado sin este recurso tan importante por desinformación. Desde el MECD se indicó que se había dado información en los centros escolares, en las asociaciones de vecinos y que incluso se recurrió a los templos de culto, como iglesias y mezquitas para que se diera a conocer a las familias que los comedores iban a estar abiertos. Pero a pesar de esta campaña, el total de plazas cubiertas resultó prácticamente anecdótico.

En 2015 el director provincial de Educación, José Manuel Calzado, en relación a la decisión de cerrar los comedores explicó que la apertura de los centros en época no lectiva obligaba al Ministerio a tener que realizar un desembolso económico extraordinario, no sólo en la compra de la materia prima, sino en la contratación ex profeso al personal encargado de atender estos servicios (este era el caso de los comedores del Mediterráneo y el León Solá). Es decir, "que cuesta dinero y creo que cualquier persona entenderá que lo que hay que hacer es utilizar con eficacia y raciocinio los recursos económicos, porque no estamos en un país donde se pueda tirar comida", apostilló.

En lo que sí se ponían de acuerdo, tanto críticos como administración, era en que se desconocían los motivos concretos de tan baja y prácticamente nula asistencia de niños a los comedores, en especial cuando la Consejería de Bienestar Social había tenido que reforzar a primeros de año el servicio del comedor San Francisco por el aumento de la demanda de familias sin recursos que se veían obligadas a tener que recurrir a estos servicios.

En cualquier caso, los comedores escolares de la ciudad no abrirán este verano porque no se ha registrado demanda, y todo ello a pesar de que el propio INE (Instituto Nacional de Estadísticas) alerta sobre que ha aumentado la tasa de pobreza en Melilla, situándose por encima del 25,8% del total de la población melillense.

Loading

Jesús Andújar

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€