El consejero de Fomento, Javier González, presentó ayer las conclusiones del expediente administrativo abierto a raíz de la caída de parte del revestimiento de la fachada de la urbanización Averroes el pasado 24 de junio de 2015 para depurar responsabilidades de la situación. Un año más tarde, la Ciudad ha declarado como responsables solidarios a la empresa Dragados y a las direcciones facultativas y de ejecución que conforman los cuatro arquitectos contratados por la Ciudad. Del mismo modo, adelantó que ya está el proyecto redactado pendiente de respuesta de los implicados para la reparación de la fachada y la parte contigua del edificio, que tendrá un coste de unos 170.000 euros. Cemosa, la empresa externa contratada por la Ciudad para aclarar las causas del desprendimiento de parte de la fachada de Averroes, explicó el por qué: una "mala ejecución" de la obra. Ahora la Ciudad señala sobre quién recae la responsabilidad de aquel incidente ocurrido hace un año y que por suerte no causó daños personales.
El consejero de Fomento, Javier González, explicó en rueda de prensa que para ello se abrió un expediente administrativo apenas varios días después de tomar posesión al frente del Área de Fomento. Así, tras redactar un informe provisional de unas casi cien páginas analizando lo ocurrido, se trasladó a las partes implicadas que son la empresa constructora, los dos arquitectos autores del proyecto (dirección facultativa), y los dos directores de ejecución que habían sido contratados por la Ciudad.
Según afirmó el titular de Fomento tras recibir las diversas alegaciones de las tres partes, ninguna aceptaba la responsabilidad total de los hechos ocurridos, e incluso, agregó, alguna de las partes no asumió ninguna parte de lo ocurrido.
Es por ello, que tras estudiar las diversas alegaciones de las diferentes partes, Fomento ha emitido un informe definitivo que describe las diversas responsabilidades de cada parte y que podrá ser recurrido ante la administración local o ante los Juzgados de lo Contencioso Administrativo seis meses después de que se desestime el recurso de alzada.
Parte de la culpa pero no toda
En el caso de la empresa Dragados, Fomento manifiesta de forma "clara y rotunda" su responsabilidad, dado que tiene la obligación de realizar las obras conforme indica el proyecto redactado y las normas de construcción habituales.
También apunta dicho informe a la dirección facultativa, que se encargan de la redacción del proyecto. A este respecto el instructor del expediente considera que no existe "ninguna anomalía" y que por lo tanto el proyecto está perfectamente redactado.
Sin embargo, sí que observa fallos en la ejecución de las obras, las cuales considera que "no se le pueden escapar a un técnico en la materia en la construcción que se había hecho de la fachada". Además, también señala como responsables a los dos arquitectos técnicos o de ejecución, cuya función es la de vigilar la construcción de las obras.
En este sentido, González cree que por las alegaciones de la empresa, Dragados está "esperando a que un juez dictamine la parte que le corresponde", dado que en dichas respuestas sostiene que "no se considera culpable del cien por cien de la mala ejecución de la obra, por lo que no va a asumir todo el coste", y es que reconoce que "en parte es culpable de la situación", apuntó el titular de Fomento.
Indemnizaciones
Es por ello, que el expediente ha declarado la responsabilidad solidaria de las tres partes que intervinieron en la edificación de las 258 viviendas de protección oficial.
De esta manera, la Ciudad requiere a Dragados "la completa reparación de las patologías que se han señalado y que forman parte del expediente según los proyectos de reparaciones que irá elaborando Fomento, los cuales serán sometidos a audiencia de todos los agentes declarados responsables".
Del mismo modo, el departamento autonómico requerirá a los directores de obra y de ejecución para que actúen como directores facultativos de las labores de reparación que se acometerán. De esta forma, Fomento les ofrece "la posibilidad de reparar ‘in natura’ su responsabilidad en las patologías".
A su vez, Fomento declara como gastos indemnizables que deberán asumir las tres partes: la reconstrucción de la mala ejecución de la obra, los gastos ocasionados a la administración por este accidente (vallado, retirada de escombros, etc.), así como, la parte de daños y perjuicios a los propietarios e inquilinos por el incidente.
Preparado el proyecto de reparación de la fachada
El consejero de Fomento adelantó que ya está redactado el proyecto correspondiente a la reconstrucción de la fachada que se ha caído y de la forma contigua que se ve separada y no está apoyado en los forjados de planta en los que se había realizado. Se le ha enviado a Dragados y a las direcciones facultativas por si quieren asumirlas, aunque aún no han contestado. Aún así, si las partes no la quieren asumir Fomento ha pedido un crédito para que la Ciudad licite la ejecución de las obras y tiene una estimación aproximada de 170.000 euros.
Sin plazos
La liquidación de las responsabilidades y de sus costes económicos se llevará a cabo al final de la reposición de las obras a la situación en la que se habían debido haber construido, motivo por el que no existe plazos. En el caso, de que alguna de las partes asuma parte de las obras de reposición del edificio, la Ciudad no le asignará el coste de dicha obra que haya que realizar.
