Los siete eurodiputados del PP en el Parlamento Europeo dieron ayer por finalizada la visita de dos días a Melilla que ha permitido acercarles a la problemática de nuestra ciudad para plantear a partir de ahora una serie de iniciativas para buscar soluciones y una mayor implicación del resto de países en la aplicación de una política común de inmigración. Un viaje que también tenía como finalidad “dar buena fama a Melilla” después de que algunos eurodiputados españoles le estén dando un “mal nombre” a las dos ciudades autónomas por la presión migratoria que están sufriendo en sus fronteras, afirmó ayer el jefe de la delegación española del Grupo Popular Europeo y vicesecretario de Estudios y Programas del PP, Esteban González Pons. En una comparecencia junto al presidente de Melilla y el PP regional, Juan José Imbroda, González Pons insistió en el mensaje que ya había dado en el día anterior respecto al intento de la izquierda española de perjudicar a la formación popular y al Gobierno de Rajoy a costa de dañar la imagen de Melilla. A su juicio, es “una tremenda injusticia” para quienes viven en la ciudad el hecho de “convertir el nombre de Melilla solo en la valla”.
Por ello, esta delegación de siete eurodiputados del PP se ha desplazado hasta la ciudad “no cuando nos convenía a nosotros, sino cuando convenía a Melilla” para dejar claro que Melilla es “una puerta de Europa para África y de África para Europa”. En otras palabras, González Pons puntualizó que la valla es una frontera que no se ciñe a separar España de Marruecos, sino que es junto con Ceuta la única frontera terrestre de la Europa Occidental en la que es necesario que el resto de los países europeos se impliquen con una política migratoria común.
En este sentido, González Pons recordó que la responsabilidad de España es gestionar la frontera garantizando su seguridad y la de “quienes intentan asaltarla”, esto es, los inmigrantes. Una doble garantía que es “muy difícil mantener en equilibrio” y, pese a todo, lo consiguen a diario las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, esto es, la Policía Nacional y la Guardia Civil, a los que el dirigente popular dijo que los políticos españoles deben “una muestra de agradecimiento en lugar de andar con exigencias de responsabilidad en un trabajo que es de los más complicados que se pueden tener hoy en nuestro país”.
La Ley de Seguridad
De este modo, el vicesecretario general de Estudios y Programas del PP se refirió a la modificación de la Ley de Seguridad Ciudadana, aprobada el jueves en el Congreso de los Diputados con polémica, sobre todo en lo relativo a la enmienda introducida por los populares para dar un mayor respaldo a los rechazos en frontera cuando traten de saltar en grupo las vallas de Ceuta y de Melilla.
Sobre este asunto, González Pons recordó que ésta es la sexta modificación de la Ley que se lleva a cabo y con ella ha quedado claro que el PSOE hace en la oposición cosas diferentes a las que hacía cuando gobernaba, época en la que seguía “la misma política” que el PP en torno a la inmigración. Esto, a su modo de ver, evidencia que en la izquierda española sigue habiendo dos partidos como siempre: “IU, que ahora se llama Podemos, y el PSOE, que ahora se llama Queremos pero no podemos”.
La reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana y la introducción de la enmienda sobre las denominadas devoluciones en caliente únicamente buscar garantizar la seguridad de los policías y guardias civiles que cada día ejercen su trabajo “con mucha dificultad”, y también proteger la seguridad de los inmigrantes que intenten saltar la frontera “siendo muy comprensivos como debemos serlo con los inmigrantes”.
Según González Pons, “los principales enemigos de la modificación de esta Ley son las mafias que comercian con la necesidad de emigrar de quienes más sufren”. En cambio, de los inmigrantes dijo que “no solo son bienvenidos a España, sin que son de los nuestros”. En este sentido, reconoció el papel que han ejercido en la salida de la crisis económica y en el hecho de haber hecho de España “un gran país”. “Les debemos un eterno agradecimiento”, afirmó antes de apuntar que el hecho de que en España se acoja a los inmigrantes no significa que tenga que ser tolerante con la inmigración irregular.
Iniciativas
Durante su comparecencia, González Pons dijo que esta visita servirá para presentar una serie de iniciativas en el Parlamento Europeo acerca de Melilla, tanto del aspecto fronterizo como del apartado económico, una vez que sus eurodiputados han visto de cerca la realidad de la ciudad. Concretamente, ayer iniciaron la agenda con una visita al paso fronterizo de Beni-Enzar, donde los máximos responsables de la Policía Nacional y la Guardia Civil y el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, les mostraron las reformas que se han llevado a cabo.
Después acudieron a la valla perimetral y al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), para culminar la agenda de trabajo con una reunión en la sede de la Confederación de Empresarios y la comparecencia. En ésta, González Pons dijo que la iniciativa más interesante que se traducirá de esta visita a Melilla será el “contacto fluido” con los eurodiputados, que insistirá al comisario europeo de Interior e Inmigración, Dimitris Avramopoulos, para que viaje a Melilla.
Según el dirigente popular, el comisario europeo “tiene la obligación” de venir a la frontera sur de Europa para comprobar las dificultades que se viven en ella, aunque se mostró convencido de que siendo griego y del PP, Avramopoulos “va a mostrar una sensibilidad superior a la mostrada por la Comisión Europea” hasta el momento.
