Delegación del Gobierno acogerá este lunes una reunión de trabajo en la que se busca lograr «la máxima cooperación posible» entre cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, Policía Local, Fiscalía, Bienestar Social e Ingesa a la hora de llevar a cabo nuevas redadas contra adultos irregulares y permitir también la recogida de menores extranjeros no acompañados que viven en la calle. Así lo adelantó ayer el consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, que felicita a todos cuanto participaron en las operaciones desarrolladas contra inmigrantes irregulares que se asientan en la zona del casco antiguo con la intención de colarse en los barcos como polizones, poniendo en peligro sus vidas.
La operación policial en la que intervinieron Guardia Civil, Policía Nacional y Policía Local se desarrolló entre la noche del pasado jueves y el viernes, en Melilla la Vieja, el puerto, la escollera, mantelete y paseo marítimo. Se localizaron 73 inmigrantes, de los cuales 36 eran adultos y los 37 restantes eran menores de edad. Los menores fueron conducidos al Centro Purísima, incluyendo los 9 que aún se está a la espera de determinar su edad con las pruebas oseométricas, con lo que el centro de menores cuenta en estos momentos con 375 residentes, la cifra más alta de su historia.
Felicitaciones
En declaraciones a Melilla Hoy, Daniel Ventura quiso felicitar a todos los organismos implicados en la operación en cuestión, que se coordinó con Fiscalía, los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, Policía Local e incluso el hospital comarcal «que reforzó su plantilla para que se pudieran hacer las radiografías y poder determinar la edad». Afirmó que ha existido una coordinación total, lo que ha permitido agilizar los trámites administrativos para conocer la edad de los jóvenes y hacerles la reseña policial. «Es de agradecer el esfuerzo realizado por todos a pesar de la carencia de recursos y es que por ejemplo en Comisaría, que se tarda unos veinte minutos en hacer la ficha de cada joven, estuvo trabajando toda la noche».
Otro ejemplo de la coordinación desarrollada es que la empresa que gestiona el centro de Purísima envió a Comisaría a uno de sus técnicos «para que con su base de datos viera cuales eran conocidos». El resultado es que de los 24 jóvenes localizados el jueves, se pudo determinar que 12 era mayores de edad, y «estamos a la espera de resolver otras nueve pruebas más que se conocerán el lunes por la mañana». En la operación policial pudo determinarse «a algunos menores acogidos en Purísima que se habían escapado del centro, unos seis, que fueron identificados en comisaría y volvieron al centro».
Próxima reunión
Anunció el consejero que a la vista del éxito de esta operación, este lunes por la tarde se celebrará una reunión de trabajo en Delegación del Gobierno «que la ha pedido el propio Abdelmalik el Barkani». El objetivo es «coordinarnos de la mejor manera posible entre los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, Policía Local y el resto de administraciones para que en el futuro cuando se haga otra operación similar se haga mejor en esta ocasión».
Indicó Ventura que el que se lleven a cabo este tipo de actuaciones de forma coordinada, «se evita que puedan entrar inmigrantes adultos en un centro que es para menores, porque han sido ya identificados, con el añadido de que al ser mayores de edad, si cometen algún delito, ya serán juzgado como tales y no por la ley del menor». En opinión del responsable de Servicios Sociales, estas operaciones policiales «son necesarias porque nos sirven para identificar, en nuestro caso, a los menores que están en la calle, evitando así que intenten irse como polizones, con lo que se vela por su seguridad».
Sobreocupación en Purísima
Afirmó el consejero que con las últimas entradas el Centro de Purísima acoge en estos momentos a 375 residentes, la cifra más alta hasta el momento, «porque en los últimos mese estamos entre 345 y 330», por lo que la sobreocupación es ya más que una realidad. Como consecuencia se ha tenido que aumentar el dispositivo de vigilancia del recinto, incorporando a un vigilante más. Daniel Ventura quiso felicitar a los trabajadores del centro de acogida como de la Gota de Leche porque «con esta presión migratoria que tenemos en la ciudad de menores extranjeros, se ha duplicado la capacidad de los dos centros y ellos siguen haciendo un gran esfuerzo y un buen trabajo». «Son trabajadores que saben cómo manejarse en diferentes situaciones complicadas, en espacios reducidos y muchos acogidos. Por todo ello hay que felicitarles», apostilló.
Todos estos recién llegados tienen que ser acomodados en unas instalaciones que ya nacieron insuficientes, por lo que «como no hay camas para todos y para evitar que duerman en el suelo, les damos colchones, mantas y demás ropa de cama, y se tienen que instalar en los dormitorios, en las zonas comunes e incluso en los pasillos porque no hay más espacio». No obstante, «se atienden todas sus necesidades básicas, como la ropa, la alimentación, la higiene y la sanidad, y se inician los trámites administrativos que son complejos y llevan su tiempo». De hecho, se da aviso a Fiscalía e incluso a la embajada de Marruecos. «Si el menor, aprovechado las horas de salida no regresa al centro, tenemos que comunicarlo a Fiscalía y a la Policía para que si los localizan, los regresen al centro».
Redadas y recogidas
Aclaró el consejero que sólo se puede hablar de redada cuando se trata de actuaciones contra adultos, pero que en el caso de menores, lo que se lleva a cabo son operaciones de recogida de aquellos que son localizados en la calle. En opinión de Daniel Ventura es necesario realizar esta diferenciación sobre todo pensando en los melillenses, «porque se ha potenciado mucho en las redes sociales el tema de la inseguridad y su vinculación con los menores».
Explicó que «hay inseguridad cometa los delitos un adulto o un menor, pero se acusa a todos los menores extranjeros no acompañados, a los menas, pero no hay que olvidar que también hay adultos que los cometen y también gente de Melilla». «Resulta curioso que ya no se oyen comentarios diciendo que tal hecho delictivo lo ha cometido un menor del Real, o menores de otros barrios de la ciudad, y no se oye porque la gente no discrimina entre sí el menor en cuestión es nacional o extranjero, sino que afirman que todos los delitos los cometen los menas y no es verdad».
