Ya había tenido la suerte de leer en otro de tus escritos anteriores que habías sido, como yo, Cartero Urbano. Como sabrás ahora llamados Reparto-1 (en moto/coche) o Reparto-2 (a pie), estos son los que aprobaron ya como personal laboral “fijo” (lo dejo entrecomillado lo de fijo porque con este gobierno, “penden de un hilo”) … … y los funcionarios que éramos Carteros Urbanos pasamos a llamarnos con un nombre muy “coloquial”…Auxiliares de Clasificación y Reparto, “casi ná”. No quería hablar precisamente de Correos, solo estos pequeños comentarios ya que en tu escrito de hoy lo vuelves a mencionar y que al parecer lo fuiste en Málaga en los años 60/70, por que doy por descontado que algo mayor que yo serás 8nací en 1951). Yo aprobé en la convocatoria de 1970, tomando posesión en Manresa (Barcelona) casi a finales de ese año y me jubilé como Cartero (así nos ha llamado siempre la vecindad y así seguirá siendo) el 31 de mayo del 2011 con casi 42 años de servicio y 60 de edad, ¿para qué más?, hay que dejar paso a la gente joven, pero, por desgracia, por culpa de la “crisis” (para unos muchos si, para otros no tanta), el consabido desempleo y el recorte sobre todo en la Administración Pública, pues en Correos también lo están padeciendo y mucho, está ocurriendo en nuestra Melilla donde los carteros no paran de manifestarse, en Castellón donde resido ocurre lo mismo, aun jubilado, cada vez que me avisan o me entero de alguna concentración en las puertas de algún centro de trabajo y otras cosas no me lo impiden, allá que me uno a ellos en sus justas reivindicaciones (fui Representante electo muchos años y Presidente de la Junta de Personal Funcionario también en casi todas las elecciones sindicales), jubilado aun sindicado y en lo que puedo, colaborando siempre por un Correos como Servicio Público, ya que siempre he considerado que es una garantía y un derecho de los ciudadanos el tener un Servicio Postal Universal y como se decía antes “con la garantía del Estado” (aquello creo recordar que lo era más por la Caja Postal de Ahorros, aquella que incomprensiblemente se cargaron, derivó en Argentaria y actualmente en BBVA, todo ello gracias al poder y el amiguismo).
Bueno ya está bien de hablar de Correos, el motivo principal de este escrito, es decirte que si en alguna ocasión por falta de tiempo dejo de leer alguna colaboración o noticia, con las tuyas no me pasa, ni con Gallardo, sencillamente me encantan, tu sapiencia sobre nuestra ciudad y su historia es envidiable y tu forma personal de narrar y contarlo sublime, felicidades, se nota que lo haces sin apenas esfuerzo y gracias a tu sabiduría y expresión fácil y cotidiana, entendible para todos. Me ha gustado mucho tu mención a la calle DUQUE (también lo había oído en aquellos tiempos de mi residencia en Melilla en los años 50 y 60, con 19 años me marché). En esa calle Duque o Teruel en la primera vivienda que daba a la parte del cementerio vivía mi gran amigo de la adolescencia y juventud Paco López (Paquito en aquellos tiempos), vivía con sus padres y hermana, yo pasé allí muchas tardes estudiando, haciendo deberes y repasando con él. Gracias, me has traído a la mente grandes y fabulosos recuerdos de aquellos tiempos. Un poco más arriba la calle Castellón de la Plana y una cuesta o monte sin asfaltar que nos llevaba al cuartel y barrio de Ataque Seco y a su famosa “bola del mundo”.
Como yo vivía en el Monte María Cristina, cuando iba a su casa bajaba normalmente desde las Canteras del Carmen por aquella escalera tan empinada, pasando muy cerquita de la “Casa del Cura”, estoy convencido que la habrás conocido también, era la prolongación de Padre Lerchundi hasta las primeras casas de Horcas Coloradas junto al muro del cementerio hebreo (desconozco si seguirá existiendo), en esas primeras casas vivía la que fue mi novia y ahora mi esposa.
También mencionas la Cañada (C/ Castelar), así la llamábamos también habitualmente y en su parte alta casi en el cementerio jugábamos los chavales de las inmediaciones nuestros buenos partidos de fútbol, en la misma calle con una pelota de goma, plástico y en ocasiones con aquellas antiguas de reglamento con la válvula, la boquilla y los cordones, los que tenían más fuerza aprovechaban cuando jugaban con la cuesta abajo a favor y haciendo paredes con el muro en la acera, para meter más goles. Yo estudié en mis primeros años en el colegio de Ataque Seco y cruzábamos por explorador Badía, Barceló, Padre Lerchundi, Cañada y subíamos por uno de esos callejones o calles estrechitas (próximos a la casa donde naciste, seguramente) hasta el colegio, me acuerdo mucho de aquello y de la C/ Margallo que también mencionas, donde trabajé desde 1967 hasta 1970 en la tienda mercería y perfumería KIRA cuyos dueños eran Ramón Úbeda y Antonia, frente a Caramelos Aguilar, de aquello te acordarás bien (un hijo de la casa de caramelos, Antonio, casado con mi compañera de Kira, Loli, viven en Castellón, nos vemos mucho y recordamos aquellos tiempos. En esa calle, el Bar Regio y sus buenas tapas, la farmacia, Tejidos Valencia, el quiosco de novelas (carrillo le llamábamos a los quioscos) de Manolo, posiblemente en esa acera de la derecha subiendo estuviese la tienda del musulmán que mencionas, “Nicolás”, si no recuerdo mal en esa zona habían una dos tiendas de ultramarinos similares. Manolo trasladó el “carrillo” a un local en C/ Málaga al lado del Bar Andalucía, un poco más arriba estaba calzados Villanueva cuyos dueños eran de mi barrio, el hijo menor Juan (Juanleño le apodábamos) fue policía nacional, compañero de mis hermanos mayores Paco y Rafa, el cine Goya que estaba un poco más arriba era de ellos también y luego el Perelló. Mi abuela tenía un puesto de frutas y verduras en “La Plaza”. Intuyo que vives en Málaga, allí también vive mi hermano Rafael cerca de donde montan la feria y mi padre era de Cómpeta, en la sierra Almijara subiendo desde la Caleta de Vélez, uva moscatel, pasas, aceite y los mejores vino de la tierra, apuesto a que lo conoces.
Bueno lo dejo aquí amigo (si me permites), paisano y colega cartero de aquellos tiempos que éramos portadores de muchas alegrías a las novias y padres sobre todo con las cartas de los soldados y emigrantes, ahora la mayoría como sabes son de disgustos, que si tienes números rojos en la cuenta, las facturas de la luz, gas, agua y con esos abusivos precios consentidos por el gobierno y las notificaciones, sobre todo esas de los desahucios para miles de españoles. Comulgo con tus ideas progresistas y por supuesto que como tu repudio toda la etapa de la dictadura y que aun persistan en nuestra tierra melillense y otras en la Península esos signos, monumentos, nombres de calles recordando a los mayores golpistas y terroristas que existieron en España. Un abrazo y por supuesto que seguiré leyéndote siempre.
