Aunque que se había especulado con la posibilidad de que el encuentro de los dos ministros de Exteriores de España y Marruecos pudiera servir para cerrar una nueva visita de Pedro Sánchez a Rabat, José Manuel Albares ha asegurado que no han tratado esta cuestión.
Cabe recordar que el presidente y el monarca alauí hablaron por teléfono antes de la Reunión de Alto Nivel (RAN) del pasado febrero y este último invitó a Sánchez a que regresara «próximamente» para una «visita oficial», ya que en ese momento él estaba fuera del país, pero esta aún no se ha materializado.
Por lo que se refiere a la cuestión del Sáhara, el ministro español ha optado por remitirse tanto a la hoja de ruta acordada tras la reunión entre Sánchez y el monarca alauí en abril de 2022 y a la declaración conjunta del pasado febrero al ser preguntado sobre si España mantiene su postura sobre el plan de autonomía marroquí después de que ya dijera que lo considera «la base más seria, creíble y realista» para resolver el conflicto.
Excelente cooperación migratoria
Tanto el ministro español como su homólogo marroquí han puesto de relieve la «excelente» cooperación que hay en materia migratoria y de lucha contra las mafias de tráfico de personas.
«Marruecos es siempre parte de la solución», ha sostenido Albares. El ministro ha reconocido que en los últimos meses «se ha producido un pequeño incremento» en las llegadas de inmigrantes irregulares procedentes de Marruecos pero ha resaltado que se partía de «cifras muy bajas el año anterior».
Asimismo, ha contrapuesto estos datos, pese al aumento de las llegadas a Canarias donde han superado los niveles de 2006 con la crisis de los cayucos, con los de la ruta del Mediterráneo Central hacia Italia o los del Mediterráneo Oriental hacia Grecia. «La colaboración con Marruecos es excepcional y da resultados», ha recalcado.
Así las cosas, ha atribuido el aumento en las llegadas a Canarias en buena medida a la «inestabilidad en el Sahel, no provienen de Marruecos» y ha explicado que ha propuesto a su homólogo marroquí una mayor cooperación.
Los dos ministros se han referido también a la delimitación de las aguas territoriales en la fachada atlántica, otro de los puntos incluidos en la ‘hoja de ruta’ y que preocupa en particular a Canarias. Puesto que tanto Marruecos como España han procedido a delimitar sus fronteras marítimas y estas se superponen, ha defendido que las soluciones que se necesitan «se encontrarán a través del diálogo, del consenso y aplicando los valores de respeto mutuo».
Los dos ministros han resaltado los resultados positivos que se han logrado en el año y medio transcurrido desde que la carta de Sánchez respaldando el plan de autonomía marroquí para el Sáhara como «la base más seria, creíble y realista» para una solución permitió pasar página a la crisis que generó la acogida por motivos humanitarios del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, y la postura española respecto a su antigua colonia.
Así, Burita ha resaltado que los siete grupos de trabajo acordados en distintos ámbitos ya están operativos y que se han producido quince reuniones hasta la fecha. Según ha precisado Albares, ahora que en España ya hay un Gobierno plenamente operativo, esperan puedan retomar su trabajo «lo antes posible» en el punto en el que lo dejaron.
