La "ínclita y bien ponderada", diputada del PP, Celia Villalobos dice que: "… Hay un número importante de personas que están más años cobrando una pensión que trabajando". Yo, como "jubileta" de Clases Pasivas, le digo a esta señora que nadie tiene el derecho a criticar a quien se deja la piel, currando por un salario de mierda, mientras ella trinca unos 7.000 (siete mil) euros mensuales, que les pagamos entre todos. Porque gracias a esas pensiones algunos, que no todos, podemos realizarnos modestamente como personas que hemos estado dando el "callo", durante 40 años, y cotizando religiosamente lo que dictaban las leyes.
Quizás habrá gente que no cuestione, y pase olímpicamente, sobre lo que cobra esta señora, pero a mí si que me interesa saber lo que percibe cada mes en realidad, por ejemplo: si tiene piso en Madrid y cobra dietas por desplazamiento desde otra ciudad, que haberlos los habrá. Pero lo que más jode a cualquier currante, es cuando alguien trabaja cobrando una buena pasta, como ella, y encima lo hace con dejadez, como cuando fue pillada jugando el "Candy Crush" en la presidencia del Congreso, critica con una impresentable desfachatez, la pensión que cobra, a quién se ha ganado la vida con un trabajo tedioso, o peligroso en si mismo, que haberlos háylos.
Hubo gente que pensaba que esta señora vino con un soplo de aire fresco a la política; cosa que yo no lo he asimilado aún, porque con acercarse a ella, y oírla hablar, se podía ver, cuando era Alcaldesa de Málaga, que no era frescura campechana, sino zafiedad.
Pero lo extraño e incomprensible que parezca, es que siempre ha estado a cubierto, como si fuera una joya imperecedera del PP, pero un desagradable lastre para la imagen de un partido que ya tiene que soportar la carga negativa, que a diario podemos observar en los juzgados. Yo pienso, como creo que ustedes también lo harán, que lo que nos afecta a todos de la ordinariez de esta señora es su responsabilidad pública porque: ¿Qué hace ella en la Presidencia de la Comisión del Pacto de Toledo, en estos momentos de crisis en nuestro Sistema de Pensiones?
Yo les pregunto a los "cabezas pensantes" del PP: ¿Es que no tienen en sus filas a alguien más puesto para ocupar ese cargo, en el momento actual?. Según se puede leer en alguna de sus biografías, es experta en temas socio-laborales, "trabajó como dependienta en una tienda de Vogue". Pero claro, eso fue antes de especializarse en la política, a partir de un trabajo en Alianza Popular en los años ochenta. Desde entonces, hasta ahora, por ese mismo motivo en España hay centenares de políticos que llevan en un cargo público 30 o 40 años, bloqueando cualquier posibilidad de renovación en bien del pueblo. Pero claro, que existiendo la clase política a la que pertenece Dª Celia, no puede verse agravada con la designación del peor candidato para el cargo más inadecuado.
Con el mismo tono con el que regañaba a su chófer en el Congreso, porque el hombre se retrasaba: "¡¡Manolo, que no eres más tonto porque no te entrenas!!"; o afirmando en otra ocasión que en España, "…Si usted se pasea por grandes empresas, ve a la gente hablando del partido de fútbol del Real Madrid o del Betis". Con ese mismo tono de insoportable ordinariez, Celia Villalobos se permite decir ahora que, "…Hay un número importante de pensionistas que están ya más tiempo en pasivo, cobrando la pensión, que en activo, trabajando", y que la obligación de los españoles de menos de 45 años es ahorrar más.
Y ahora con la inquietud que se desborda por nuestras entendederas, si oímos hablar de pensiones a esta señora, y descubrimos que es la Presidenta de la Comisión del Pacto de Toledo, es como si ingiriéramos un vaso de "Agua de Carabaña", y "cagaleras patabajo que te crió". Más o menos es por el temor de que la crisis del sistema de pensiones sea insuficientemente tan grave como para que, al menos, se tome en serio, con rigor, y respete a los españoles que hoy se irán a currar sin saber si mañana podrán cobrar su pensión. La de ella, muy cojonuda, ya sabemos que la tiene asegurada de por vida, y no como la de cualquier currante actual. Y si no, hagan la cuenta, y comprueben si con lo que cobra ella al mes, no hay para varias viudas de esos currantes.
Yo pienso que en el Congreso harían falta varios Azaña, y un Francisco Silvela, al que llamaban: "La Daga Florentina", para que sonrojara a algunos politicastros de medio pelo, cuando hacen declaraciones tan vergonzosas y antisociales, como los que suele hacer esta señora.
