Un refuerzo de efectivos de la Policía Nacional y la Guardia Civil culminará las actuaciones que se han llevado a cabo a lo largo de esta legislatura en el paso fronterizo de Beni-Enzar, donde unas obras de remodelación integral y una reordenación del tráfico de peatones y vehículos han permitido que nuestra principal frontera con Marruecos haya experimentado “un antes y un después”. Así lo afirmó ayer el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, que subrayó que el resultado final que se puede ver desde hace unos días es fruto de la implicación de todo el mundo durante los últimos años. El Barkani presentó ayer las mejoras de las infraestructuras y del funcionamiento del paso fronterizo en una rueda de prensa a la que acudieron los responsables de la Policía Nacional, la Guardia Civil, la Policía Local y la Consejería de Seguridad Ciudadana. En esta comparecencia, el delegado del Gobierno admitió que el esfuerzo que se ha hecho en las obras y reordenación de los tráficos no es suficiente para seguir avanzando en el objetivo de mejorar la fluidez sin menoscabar la seguridad, por lo que anunció un incremento de efectivos.
Así, dijo que la Policía se reforzará con 20 agentes en comisión de servicio, como en los dos veranos anteriores durante la Operación Paso del Estrecho (OPE), mientras que en la Guardia Civil se está pendiente de los trámites para hacer efectiva la llegada de nuevos efectivos. La Dirección Adjunta Operativa de ambos cuerpos de seguridad ya están trabajando para mejorar esos recursos humanos que “en breve, no más de un mes” podrían llegar a Melilla para dar por finalizada toda la actuación en la frontera de Beni-Enzar.
Toda la legislatura
El Barkani recordó que la mejora de la frontera era un objetivo desde prácticamente el inicio de esta legislatura, cuando el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, hizo su primera visita a Melilla el 9 de julio de 2012 y pudo conocer de primera mano la realidad de los pasos fronterizos y la valla.
Según El Barkani, se ha conseguido mejorar las condiciones de trabajo de los funcionarios de las Fuerzas de Seguridad del Estado y Aduana, lo que a su vez redunda en una mejora de la atención a los ciudadanos aumentando la fluidez y agilidad en el paso peatonal y de vehículos sin que ello suponga un menoscabo de la seguridad.
Para ello, se han llevado a cabo unas obras de remodelación integral que han supuesto una inversión de 1,1 millones de euros por parte del Ministerio del Interior, a las que se suma una reordenación de los tráficos basada en la separación de vehículos y peatones, y también la distinción entre quienes pasan mercancías y aquellos que viajan en régimen de turista.
Así, se han establecido tres carriles de entrada, tres de salida y otros dos reversibles en función de las necesidades, de modo que en momentos de mucho tráfico podría haber cuatro carriles de entrada y cuatro de salida, como ya se ha puesto en práctica durante el pasado puente festivo de la Constitución. Los carriles, además, están señalizados para separar a los que llevan mercancías de los que solo van a pasar a Melilla o a Marruecos en régimen de turista, de modo que éstos no se vean perjudicados por la falta de fluidez y retenciones que provocan quienes se dedican a pasar mercancías.
Lo mismo ocurre en el caso de los peatones, que también cuentan ya con zonas de paso específicas para los porteadores, a los que se ha abierto la puerta lateral, mientras que el resto puede pasar por la acera lateral, vallada y señalizada para que no interfieran en ningún momento en la zona de vehículos, que era una de las cosas consideradas “imprescindibles” para evitar lo que hasta ahora ha sido “fuente de conflicto y enormes colas” de vehículos.
El Barkani también destacó ayer la mejora de los controles de seguridad de la Policía Nacional y la Guardia Civil con la instalación de garitas acondicionadas y conectadas a las bases de datos, distinguiendo en la zona de peatones entre ciudadanos Schengen y extracomunitarios y habilitando un pasillo acristalado para los rechazos. Estas mejoras permitirán que haya hasta seis policías a la vez haciendo el control documental de los peatones a la entrada a Melilla, lo que supone un importante avance respecto a la situación que había hace poco.
Sobre las garitas del instituto armado, de cuyo estado se quejó anteayer AUGC, dijo que se ha remitido informe a la Subdirección General de Infraestructuras para que se lleven a cabo las mejoras necesarias.
Con todas estas medidas “no se acaban todos los problemas y no es la panacea tampoco, pero sí hay un antes y un después en el funcionamiento de Beni-Enzar”, dijo El Barkani antes de dejar claro que “en un paso fronterizo como el nuestro no se puede cruzar en pocos minutos” porque es necesario hacer un control documental y fiscal que requiere un tiempo, sobre todo si hay varios coches delante.
Asimismo, dijo que también están pendientes de llevarse a cabo otras mejoras en el paso de Barrio Chino para “adecentar la zona” y subrayó que es necesario abrir un nuevo paso con Marruecos para agilizar el resto de las fronteras.
