Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

Un año más

melillahoy.cibeles.net fotos 1671 cue

Ha pasado ya más de una década y el inmueble que en su día sirvió de vivienda a los frailes Capuchinos no ha visto aún la luz como hospedería y lleva camino de continuar así. Melilla es una ciudad donde los espacios cobran gran importancia debido a la imposibilidad de aumentar su superficie. De ahí que cada solar, cada inmueble o cada metro cuadrado desaprovechado tenga notable repercusión. En este contexto nadie se explica como las autoridades no sean capaces de sacar adelante la anunciada, hace ya más de una década, en concreto doce años, la Hospedería del Conventico. Un lugar que aportaría variadas ventajas en la emblemática zona de Melilla la Vieja. Ni Defensa, ni la propia Ciudad Autónoma han logrado, desde entonces, desbloquear la situación con el Obispado de Málaga que está en posesión de su uso.

La divertida novela del escritor barcelonés Eduardo Mendoza, "Sin noticias de Gurb", un libro ameno donde los haya que vio la luz en 1991 y que tuvo tal éxito en su momento que fue traducido a seis idiomas, entre ellos, el alemán, polaco y danés, aunque no tenga ninguna similitud, con la hospedería nos recuerda que continuamos también "sin noticias" pero en este caso no de Gurb, sino de la cacareada Hospedería del Conventico, en Melilla la Vieja, que continúa aún absolutamente anquilosada.

Los prolegómenos del “caso hospedería” se remontan al año 2004, cuando el presidente de la Ciudad Autónoma en una bonita mañana de junio y desde la amplia terraza de la por entonces, y también por ahora, Casa del Conventico, desde la que se domina una maravillosa vista del faro sobre un espectacular Mediterráneo, anunciaba que en septiembre de ese mismo año finalizaría la reforma iniciada algún tiempo atrás.

Ha pasado ya más de una década y el inmueble que en su día sirvió de vivienda a los frailes Capuchinos no ha visto aún la luz como hospedería y lleva camino de continuar así. De hecho ya en el año 2010, fecha de la última visita pública del primer mandatario melillense, decía el presidente Imbroda que, al parecer, se había llegado a un acuerdo con el Obispado para la apertura del establecimiento hotelero y, hasta la fecha. Aquello quedó en un “al parecer”.

Pero ya se sabe, las cosas de palacio van despacio, a pesar de tratarse de un edificio destinado a albergar tan sólo una docena de habitaciones por lo que su puesta a punto tampoco representaría una especial dificultad.

Pero, el problema de apertura no se centra en la remodelación, sino en los acuerdos para la gestión del local con el Obispado, que está en posesión del uso de la Casa del Conventico, como hemos señalado en repetidas ocasiones. Por tanto, el problema de propiedad y de uso del inmueble en el que están implicados Defensa y Obispado continúa enquistado, hasta el punto de que hace ya unos años una de las partidas que la Ciudad Autónoma iba a destinar para dar luz verde a la hospedería se destinó a arreglos en la colindante Iglesia de la Purísima Concepción en Melilla la Vieja que acusaba un gran deterioro, por lo que el futuro de la hospedería sigue siendo el quiste de un casco histórico que día a día experimenta mejoras pero que, en este asunto, no avanza y no hablamos de unos meses, sino de una docena de años.

Loading

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€