El PP de Melilla acusó ayer a la oposición de “absoluta demagogia” en sus críticas sobre la situación de los pasos fronterizos entre Melilla y Marruecos, y recordó al PSOE su inacción durante la crisis fronteriza de 2010, en la que hubo vejaciones hacia las mujeres de la Policía Nacional.
En rueda de prensa, la secretaria de Comunicación del PP de Melilla, Cristina Rivas, expresó el apoyo de su formación a la Delegación del Gobierno por su gestión en la frontera, así como el “más firme apoyo” a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Respecto a las críticas socialistas, que el lunes llegaron a exigir la inmediata dimisión del delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, Rivas preguntó al PSOE si tiene memoria sobre el papel que desempeñó cuando estaba al frente del Ejecutivo y tenía las competencias en la materia.
En concreto, se refirió a la crisis fronteriza del verano de 2010, cuando los pasos entre España y Marruecos en Melilla fueron boicoteados por activistas del país vecino y fueron escenario de altercados y tratos vejatorios contra las mujeres policías que prestaban servicio en ellos, unos hechos ante los que “el PP fue el único que salió a defenderlas”.
Frontera internacional
La dirigente popular dejó claro que la Delegación del Gobierno y la Ciudad Autónoma están tratando de organizar el trafico, tanto de vehículos como de mercancías, y ha reiterado que la coordinación de la frontera entre España y Marruecos “es fundamental”, pero recordó que el país vecino es soberano y desde Melilla no se le puede decir qué tiene que hacer.
Insistió en que ambas administraciones trabajan conjuntamente para que Melilla tenga una “frontera internacional” y realmente sea “la frontera sur de Europa”, para lo que apuntó que “lo más importante es la seguridad de los ciudadanos”, algo que no se puede conseguir con desorden.
Por lo tanto, negó que la gestión de la Delegación del Gobierno en la frontera sea “un capricho”, como anteayer afirmó Coalición por Melilla (CPM), sino que lo que se pretende es “hacer las cosas con rigor, seriedad y absoluto orden” por la seguridad de los melillenses y el resto de los residentes en la ciudad.
Sin embargo, lamentó que con lo ocurrido en los últimos días “da la sensación de que a la oposición no le importa Melilla” porque no respalda los “grandes proyectos de ciudad”, algo que a su juicio se pudo ver el lunes en la Asamblea, donde votó en contra de los reconocimientos extraoficiales de crédito para pagar facturas atrasadas”.
“Se oponen a todo, incluso a pagar a las empresas de Melilla”, reprochó Rivas al resto de partidos.
Hospital Universitario
La dirigente popular se refirió también a las declaraciones de la secretaria de Organización del PSOE local, Sabrina Moh, respecto al Hospital Universitario. “Pedir la dimisión del delegado del Gobierno es no saber, ni tener memoria histórica”, aseveró Rivas, que expuso que “la paralización de las obras del nuevo hospital se debió a una denuncia por un modificado fruto de la gestión de un Gobierno de Zapatero.
