La Unidad Militar de Emergencias (UME) destacó ayer la preparación con la que cuenta la Ciudad Autónoma ante una catástrofe o accidente gracias al Plan Territorial de Emergencia de Melilla (Platerme) y el plan sísmico. El máximo responsable de la UME, el teniente general César Muro Benayas, explicó a preguntas de los periodistas que el plan sísmico con el que cuenta la Ciudad Autónoma es muy completo y resolutivo ante el caso de que Melilla sufriera un terremoto, como de hecho podría ocurrir al estar en una zona de cierto riesgo sísmico. “Es suficiente para hacer frente a ese tipo de riesgo. Pueden estar tranquilos los melillenses, no hay ningún problema”, dijo Muro Benayas sobre el plan sísmico tras destacar la gran preparación del Platerme para que la ciudad pueda responder ante situaciones de emergencia, algo en lo que son “expertos cuando la climatología se pone mal”.
Muro Benayas, que fue comandante general de Melilla entre 2008 y 2011, ha regresado a la ciudad para supervisar el simulacro multirriesgo de nivel 2 que empezó anteayer. En esta ocasión, la UME ha desplazado 144 efectivos y 44 vehículos para participar de forma coordinada con los cuerpos de seguridad y emergencias de Melilla y la Comandancia General (Comgemel).
Una quincena de incidencias
El simulacro contempla una quincena de incidencias que se dan en Melilla a raíz de un supuesto terremoto ocurrido el lunes. Eso obligó a activar el Plan Territorial de Emergencias, que ayer vivió uno de sus días clave con el desarrollo de hasta seis ejercicios, muchos de ellos incluso solapados unos con otros. Bomberos, Policía Local, Policía Nacional, Guardia Civil, la UME y el cuerpo de voluntarios de Protección Civil, además del INGESA, el puerto y el aeropuerto, tuvieron que emplearse a fondo para responder ante incidencias que podrían darse después de un seísmo.
Ayer, de forma simulada, Melilla amaneció con un edificio declarado como Bien de Interés Cultural (BIC) afectado por el temblor, obligando a numerosos efectivos a llevar a cabo un apuntalamiento durante casi 12 horas. Este ejercicio, desarrollado en el acuartelamiento de Santiago, tuvo su importancia al ser una de las competencias que recientemente ha adquirido la UME.
La mañana empezó con esa alerta, detectada tras un reconocimiento aéreo de la zona que se había visto afectada por el terremoto. Poco después, la Policía Nacional, la Guardia Civil y la Policía Local valoraban varias incidencias de seguridad, concretamente por vandalismo urbano en comercios, trabajo de gabinete que se hizo en la Sala 112 para responder ante posibles casos de saqueo.
Poco después, a media mañana, tuvo lugar uno de los ejercicios más espectaculares de la jornada en la playa de Horcas Coloradas, escenario del supuesto amerizaje de una aeronave que no podía tomar tierra por problemas en el aeropuerto.
Según relató el comandante Domingo Expósito, esta incidencia planteaba la necesidad de rescatar a los 30 o 40 pasajeros que viajaban en la aeronave, algunos de los cuales llegaron por su propio pie a la orilla y otros necesitaron ayuda para salir del agua y recibir asistencia sanitaria del INGESA, la Cruz Roja y la ayuda de los voluntarios de Protección Civil. Paralelamente, la UME trataba de identificarlos trabajando codo con codo con AENA, que facilitó la lista nominal de los pasajeros.
Al mismo tiempo, era necesario atender otra incidencia en el puerto, donde supuestamente se había roto un depósito de combustible y era necesario desplegar una barrera anticontaminación. Este ejercicio, además, fue un poco más allá incorporando un rescate de un trabajador del puerto que cayó al fondo del mar, ante la preocupación de figurantes que hacían el papel de los familiares.
Ya por la tarde, en medio de la oscuridad, se desarrollaron los últimos ejercicios, concretamente la búsqueda de personas desaparecidas en la playa de Horcas con perros de rescate y una actuación en el pantano de las Adelfas por daños y una posible rotura de la presa, en la que buzos de la UME se sumergieron para hacer una valoración.
Entrenamiento exhaustivo
Este simulacro multirriesgo vivirá mañana otra jornada clave con otras siete incidencias programadas, que al igual que ayer se podrán seguir en tiempo real a través del perfil de Twitter de la Sala 112 (@112MELILLA), con el hashtag #SIMULACRO_ML_2014.
Muro Benayas, que estuvo presente en buena parte de los ejercicios para ver personalmente su desarrollo, dijo que aún es pronto para hacer una valoración del simulacro, pero destacó que es un ejercicio muy completo que servirá a todas las partes para hacer “un entrenamiento muy exhaustivo e interesante” y permitirá que una vez concluido, la Ciudad Autónoma pueda evaluar si es necesario introducir cambios en el Platerme.
El responsable de la UME explicó que “la única limitación” que encuentra la UME a la hora de afrontar situaciones de catástrofes en Melilla es la ubicación geográfica de la ciudad, lo que dificulta el desplazamiento rápido de los efectivos. Para este simulacro se han desplazado en los barcos de línea regular de Melilla, pero en casos reales habría sido necesario recurrir al avión para el transporte de una parte del despliegue y al barco de Ceuta, desplazándolo hacia Melilla, para el resto de los efectivos, cuya base está en Morón de la Frontera (Sevilla).
