Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

Los recursos que el MECD destina a los alumnos con TEA no son suficientes

Según el CSIF-Educación (Central Sindical Independiente y de Funcionarios) de Melilla, las instalaciones dedicadas a niños con Trastornos del Espectro Autista (TEA) en el colegio Pedro de Estopiñán, que en principio “se vendieron como un gran logro del Ministerio de Educación”, son en realidad deficientes y no cumplen con los requisitos mínimos necesarios para ofrecer una educación de calidad a estos alumnos. Desde el CSIF se exige una mejora de personal y la preparación de un aula que esté “mejor dotada”.

Según una comunicación difundida por la sección de educación del CSIF (Centra Sindical Independiente y de Funcionarios) de Melilla, la sala para alumnos con TEA (Trastorno del Espectro Autista) innaugurada hace ya seis años por el director provincial del Ministerio de Educación en el colegio de infantil y primario “Don Pedro de Estopiñán”, no cumple en la actualidad con los requisitos mínimos para que se pueda considerar que estos niños están recibiendo “una educación de calidad”.
Pese a que, en un principio, el director provincial, José Manuel Calzado, “vendiese” la apertura de este aula como un gran logro del Ministerio, el personal del centro ha podido observar, tras años de trabajo, una serie de deficiencias que ponen en entredicho la dimensión de dicho logro.
Cuando los profesionales del centro hacen referencia al aula, no sólo se toma en consideración el propio medio físico de la misma, sino también el personal laboral asociado a la misma, factor de gran importancia a la hora de ofrecer una educación de calidad a unos alumnos que requieren de unas atenciones más concretas que el resto.
De entre las peticiones realizadas por el CSIF, destacan las relacionadas con la necesidad de un aumento de la plantilla del centro educativo, incluyéndose en la misma, concretamente, a un especialista en Audición y Lenguaje, así como un cuidador.
Estos puestos son “necesarios e imprescindibles” para poder ofrecer la debida atención educativa a los alumnos, y añaden: “Nos consta que no somos los únicos que lo pedimos”

Falta de espacio
Por otra parte, el espacio físico del aula resulta insuficiente para atender al total de seis alumnos con TEA que actualmente utilizan la utilizan, dado que los alumnos requieren de diferentes zonas de trabajo para poder asociar el lugar físico con la tarea a realizar. Además de la imposibilidad de contar con dichas “áreas de trabajo”, el aula “tiene una mala ventilación”.
Otro problema asociado a las pequeñas dimensiones del aula tiene que ver con la propia interacción entre los alumnos: los niños deberían estar lo suficientemente separados debido al riesgo derivado del despliegue de conductas “disruptivas e impredecibles”, cosa que, adía de hoy, resulta imposible.

Los trastornos del espectro autista

Los “trastornos del espectro autista” constituyen un grupo de trastornos complejos, que afectan a un 1% de la población y cuyas manifestaciones clínicas varían mucho en función del trastorno concreto y el paciente, pudiendo oscilar entre la discapacidad intelectual y las altas capacidades. A pesar de esta variabilidad, estos trastornos cuentan con una serie de características comunes: En general, sus habilidades de interacción con los demás son muy distintas de las habituales (falta de interés por el contacto social, problemas de empatía); por otro lado, presentan alteraciones de las habilidades de comunicación verbal y no verbal, tienen un repertorio limitado de intereses y de conductas, y sus capacidades para imaginar y entender las emociones y las intenciones de los demás son limitadas, por lo que suelen tener problemas de interacción social.

Loading

Fernando Lamas Moreno

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€