El miércoles a mediodía, el salón de actos del hospital comarcal acogió la clausura del ciclo formativo de la XV Promoción de Enfermería Interno Residente de la especialidad Obstétrico-Ginecológica (matrona), que durante dos años ha cursado estudios en el Área de Salud de Melilla, dependiente del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA). Las alumnas Sara Carrión Pantoja, Esther Domínguez Sánchez, Raquel Higueras Calvente y Sara Nieto Conde, recibieron durante el acto los títulos y certificados acreditativos de haber cursado la especialidad, así como un obsequio del INGESA como recordatorio de su estancia en la ciudad.
El Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, indica que el acto de clausura “lo abrió María del Carmen Torreblanca, matrona y coordinadora de la Unidad Docente, quien resaltó que esta promoción se ‘reviste de unas características que difícilmente podremos olvidar, pues quedará en la memoria personal y colectiva como algo que nos golpeó duramente a cada uno de nosotros’”. Explicó que “la pandemia del COVID-19 ha influido en las nuevas matronas que han pasado ‘días de oscuridad’ y ese valor obtenido debe ser su seña de identidad, especialmente porque las cuatro han permanecido lejos de sus hogares durante largo tiempo”, señalando que “han conseguido soportar esa situación porque estaban haciendo lo que les importaba, ‘ser matronas’ y que lo han hecho trabajando al ‘unísono, con fuerza, con muchas ganas de aprender, con muchas ganas de hacerlo bien técnicamente y siempre con el corazón’”.
En su intervención, afirma INGESA, “Torreblanca tuvo palabras de reconocimiento también para el profesorado y las tutoras que han trabajado con ellas durante los dos años de la formación”.
A continuación, tomó la palabra la directora de Enfermería de Atención Especializada, Concepción Cortés, “quien también se refirió al cambio que supuso la llegada de la pandemia en el ciclo formativo, ya que en el primer año las nuevas matronas comenzaron con una actividad importante de partos y con mujeres embarazadas hasta la llegada del COVID”. Sin embargo, corroboró, “en el Hospital Comarcal se aprendió a trabajar con EPIs y con el aumento de la complejidad que la pandemia conlleva”.
Destacó Cortés que para el INGESA es un orgullo disponer de la Unidad Docente de EIR y “contribuir a la formación de nuestras futuras matronas”. En este sentido explicó que en la actualidad en el Hospital Comarcal “casi el 50% son matronas” formadas en Melilla.
Seguidamente, el director territorial del INGESA, Omar Haouari, recordó que “en años precedentes, cuando se celebraba el fin de una promoción de matronas, se ponía en valor la formación recibida en el Hospital Comarcal en el que la profesión de matronas destaca por la atención a miles de casos”, donde añadió que “esa intensidad en el flujo de trabajo diario con esas características garantizaba una formación completa para su futuro profesional”. Sin embargo, apuntó, “este año es evidente que todo ha cambiado por la pandemia del COVID. Han bajado los partos; pero ha aumentado la complejidad y prueba de ello son los partos de pacientes COVID, por cesárea y natural, que en este Hospital se han producido”.
