La 'huelga de deberes', convocada por Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA) para los fines de semana del mes de noviembre, comenzó ayer con el objetivo de reivindicar la recuperación del tiempo libre de los alumnos y sus familias.
Esta acción forma parte de la campaña 'En la escuela falta una asignatura: Mi tiempo libre', presentada por esta organización de padres el pasado mes de septiembre. "Se trata de dar prioridad a las actividades familiares y si los profesores se niegan a apoyarla, son ellos los que invaden un tiempo que no les corresponde", ha firmado el presidente de CEAPA, José Luis Pazos. En el marco de la campaña se ha creado la web www.educacionsindeberes.org, un espacio que aloja el vídeo protagonizado por un caracol que simboliza a los estudiantes y está cargado con una gran mochila llena de libros. "Tengo derecho a jugar, pensar, aburrirme, a disfrutar de mi infancia y mi adolescencia. Los deberes me lo impiden".
La iniciativa la rechaza el sindicato ANPE porque, a su entender, "cuestiona la labor del profesorado y atenta contra la libertad de cátedra y el principio de autonomía pedagógica y organizativa de los centros". El presidente del sector de Educación de CSIF, Mario Gutiérrez, pide a las familias que hagan "caso omiso" a esta huelga. También la Confederación Católica de Padres de Alumnos (CONCAPA), ha criticado esta campaña. El ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, afirma que no es momento de huelgas, sino de diálogo para alcanzar el pacto educativo y advierte de que la iniciativa de CEAPA es "muy mala idea" porque demuestra "desconfianza en el profesorado".
