El Ministerio del Interior ha situado en torno a 190 el número de nacionales o residentes en España que se han enrolado a las filas del Daesh y grupos afines en Siria o Irak. De ellos, un 25% ha fallecido en estos países y un 15% de ellos han retornado, unas cifras relativamente bajas si se comparan con otros países europeos como Francia o Alemania. Los datos han sido facilitados por el ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, en una entrevista en la revista de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, en la que insiste en que el riesgo es "muy real" y que la lucha será "larga, quizá de años". Fernández Díaz cataloga de "magnífica" la relación de España con países como Marruecos y se muestra convencido de que los terroristas no conseguirán nunca sus objetivos. "De la misma forma que el terrorismo de ETA no nos venció, tampoco esta nueva amenaza logrará sus objetivos", sostiene. Desde 2015, año en que se elevó a 4 el Nivel de Alerta Antiterrorista, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad han detenido a150 yihadistas en España.
Este mismo martes fueron arrestado en Gijón y San Sebastián dos miembros activos de Daesh considerados por Interior "piezas clave en el entramado propagandístico y de captación de la organización terrorista". Ambos eran originarios de Marruecos. En el último mes, la Policía ha desarrollado cuatro operaciones en las que ha detenido a diferentes personas acusadas de su relación con Daesh.
El 28 de septiembre fueron detenidos cuatro españoles y un marroquí por extender el "terror informativo" en Europa a través de la página 'Islam en español'. El 22 se detuvieron a dos acusados por enaltecer el terrorismo yihadista en Madrid y días antes se hizo lo propio con otros dos en Valladolid y Murcia. Fernández Díaz hace un balance desde que asumió el cargo en el Ministerio del Interior, una etapa en la que se han llevado a cabo 95 operaciones contraterroristas con más de 200 terroristas detenidos gracias a la labor de las fuerzas de seguridad. "Y lo hacen con mucha profesionalidad y abnegación, pero también pagando un precio muy alto, como desgraciadamente sucedió en el ataque terrorista a nuestra Embajada en Kabul, donde dos agentes de la Policía fueron asesinado", rememora Fernández Díaz.
Balance de detenidos
Desde 2015, año en que se elevó a 4 el Nivel de Alerta Antiterrorista -de 5 posible–, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado han detenido a más de 154 yihadistas. Del total de detenciones, 122 se han producido en España y una treintena en otros países con los que colabora la policía española. Los últimos quince yihadistas han sido detenidos en los últimos veinte días gracias a cinco operaciones de la Comisaría General de Información en Madrid, Valladolid, Murcia, Barcelona, Melilla, Gijón, San Sebastián, Ceuta y Altea. También se han practicado arrestos en Bélgica, Alemania y Marruecos de ciudadanos en su gran mayoría originarios de este último país.
Amenazas a España
Desde el año 2014, el número detenidos por su vinculación al terrorismo yihadistas asciende a más de 156. La mayoría de los detenidos lo son por la realización de actividades de reclutamiento, adiestramiento, captación y adoctrinamiento a fin de integrarse en el engendro califal del Daesh y se concentran fundamentalmente en las ciudades de Barcelona, Madrid y Ceuta y Melilla.
En los últimos meses ha aumentado significativamente el número de menciones a España así como el subtitulado al castellano de las producciones propagandísticas del Daesh. Algunas de estas aluden al Al-Andalus en el contexto de la competencia existente entre las dos principales matrices de la yihad global como son el Daesh y Alqaeda por el control del norte de África. Por otra parte, el objetivo también estaría en la búsqueda de la emulación en suelo español de atentados perpetrados por sujetos autónomos en otros países europeos frustrados por la imposibilidad de viajar a zonas de conflicto.
Así, las principales amenazas de origen yihadista hacia España vendrían de la mano de los combatientes retornados y de la reconversión de las actuales estructuras logísticas para el envió de voluntarios en estructuras con vocación de atentado al no poder realizar su labores por falta de capacidad o necesidad. A ellos habría que sumar la amenaza de sujetos autónomos radicalizados y aquellas amenazas provenientes directamente de las matrices terroristas y sus organizaciones afines. La posible existencia de un posible grupo denominado Al-Andalus encuadrado dentro del aparato de operaciones exteriores del Daesh cuya finalidad seria la comisión de atentados terroristas en España no parece que vaya a contribuir en la disminución del actual nivel de alerta antiterrorista.
