Se acababa de abrir un expediente informativo sobre la paradero de un supuesto delito socio económico encargado a la empresa Demoscopia por el anterior gobierno municipal presidido por Gonzalo Hernández y que no aparecía en el Ayuntamiento. Los datos que se disponían, por entonces, revelaban que el informe había costado más de 2.300.000 pesetas y que, en principio, estaba destinado a la confección de futuros presupuestos municipales. Sin embargo, se había comprobado que, en realidad, se trataba de un sondeo sobre el estado de opinión de la ciudadanía respecto a la gestión municipal del equipo de Gonzalo Hernández. El informe fue entregado en la Alcaldía y fue abonado por el anterior gobierno socialista dos días antes de la toma de posesión de la nueva Corporación.