Los grupos de la oposición manifestaban su malestar por el retraso que existía en la elaboración y formalización del acta del Pleno de la moción de censura contra Ignacio Velázquez que no prosperó. El impasse imposibilitaba al PSOE saber cuál de las tres vías legales abiertas contra Velázquez debía ser la primera en ejercerse. El PSOE restaba importancia al hecho de que hubiese sido este partido el que en un municipio peninsular fuera el primero en utilizar el recurso del deber de abstención al que recurrió Velázquez para impedir a Enrique Palacios votar la moción de censura.
El viceconsejero Aisa Ahmed recomendaba a los sindicatos a cumplir con sus responsabilidades y a no entrar en cuestiones políticas, por su apoyo expreso a Enrique Palacios.
