Alrededor de 140 militantes de UPM elegían de forma unánime y a mano alzada a Daniel Conesa como nuevo presidente del partido, en sustitución de Juan José Imbroda, que, en cumplimiento de los estatutos upemistas, que incompatibilizaban la condición de cargo del gobierno con el de alto cargo orgánico de UPM; optaba por promover su suplencia en el máximo puesto de la destacada formación localista melillense.
El Consejo de Gobierno decidía encargar un informe jurídico para establecer si el equipo de Mustafa Aberchán pudo incurrir en responsabilidades penales o económicas por la aprobación de la VPT, a pesar de los "reparos de legalidad" de los técnicos.
Se anunciaba que se incrementaría la plantilla del Comarcal y se crearía la Unidad de Oncología.
