La decisión de Ciudadanos (Cs) de expulsar de sus filas al presidente de Melilla, Eduardo de Castro, no provocará, “de momento”, ningún cambio en el escenario político de la ciudad ni tampoco en el seno del Gobierno que comparte con Coalición por Melilla (CPM) y el PSOE. A preguntas de los periodistas, la vicepresidenta primera de la Ciudad Autónoma y secretaria general del PSOE local, Gloria Rojas, explicó que la reunión mantenida este lunes entre los tres socios políticos no era “excepcional” a raíz de la expulsión de De Castro, sino “habitual” para hacer “una serie de reflexiones” llegado el ecuador de la legislatura. Rojas quitó hierro, de este modo, al encuentro donde participaron De Castro, el presidente de CPM, Mustafa Aberchán, y ella misma, que se prolongó durante dos horas y en el que no hubo conclusiones, ya que se emplazaron a seguir hablando dentro de un par de semanas.
En esa próxima reunión, dijo Rojas, los tres socios hablarán de la remodelación que tienen pendiente para la entrada en el Ejecutivo de la nueva diputada de CPM, Cecilia González, que no se puso sobre la mesa en el encuentro celebrado este lunes, dedicado a “cuestiones más generales”.
Estudio jurídico
Evitó dar detalles de la reunión excusándose en que hay cuestiones que no puede decir porque “pertenecen al ámbito de la privacidad” de dicho encuentro entre los tres socios, y otras que corresponde comunicarlas a De Castro, el cual dará una rueda de prensa más adelante para hablar de ello.
Una de ellas, por ejemplo, si la Asamblea va a estudiar a nivel jurídico si De Castro puede seguir como presidente de Melilla tras su expulsión de Cs, ya que esta decisión le convertirá, previsiblemente, en diputado no adscrito.
Rojas explicó que esa consulta jurídica es un encargo que corresponde al presidente y será él quien lo comunique, así como “las acciones que se están emprendiendo” si De Castro se queda sin grupo político, actualmente el Mixto, que comparte con el único diputado de Vox tras la expulsión hace más de un año de su expresidente, Jesús Delgado.
En cualquier caso, Rojas dijo no tener constancia de que De Castro “sea un tránsfuga” si se queda con el acta de diputado cuando la expulsión de Cs se haga efectiva en la Asamblea. “No está en ningún sitio que De Castro sea un tránsfuga. Esto lo va a aclarar él”, señaló Rojas en alusión al punto del Pacto Antitransfuguismo en el que impide que personas tránsfugas puedan ocupar puestos en las mesas de las Cámaras, como es el caso del presidente de Melilla, que es presidente de la Asamblea y, por lo tanto, de la Mesa.
Gloria Rojas respondió en este punto al PP afirmando que dicho partido “tendría que callarse la boca al 100 % después de todo lo que ha ocurrido en Murcia”, por lo que le instó a que “tenga un poco de decencia política y mire lo que hace su partido antes de hablar de ciertas cosas”.
