Por Natalia Bocanegra. Coach (“www.coachnataliabocanegra.es”)
Hoy os hablo de lo que continuamente tenemos desde que nos levantamos hasta que cerramos los ojos y dormimos. Algo que hace mella en toda persona, os pregunto con esto; ¿Somos conscientes del poder que tienen nuestras palabras? Sé responsable con lo que dices. Te explico; El lenguaje que usamos “LAS PALABRAS”, pueden ejercer un gran impacto sobre cómo experimentamos o vemos el mundo de hecho la palabra es una herramienta crucial si queremos ser más flexibles y efectivos a la hora de responder ante las dificultades de la vida. La palabra tiene un enorme poder para sanar o para enfermar y es por eso que debemos hablarnos con cariño y cordialidad, incluso en los momentos más difíciles.
La persona que quiere ver cosas buenas en la vida tiene que tener cuidado con su lengua y sus palabras, porque con ella se puede construir, inspirar o también destruir y acabar con los sueños propios.
Daros cuenta que, igual que el hierro, los palos, las piedras rompen algún material o los mismos huesos de una persona, os aseguro que, las palabras rompen el corazón, la autoestima, la dignidad o el aprecio por alguien. Realmente las palabras son como monedas que una vale mucho como muchas valen por una. Sino piensa, ¿Cuántas relaciones se han roto por las palabras? O ¿Cuántas personas se alejaron por lo que un día en una discusión se dijo? Y es que hay tres cosas que no vuelven como son; 1) la flecha lanzada, 2) la palabra dicha y 3) las buenas oportunidades.
No puedes hablarte mal porque eso crea en tu subconsciente un movimiento energético en ti (todo tu ser) y en tu exterior. Si te dices yo soy tonto/a, yo soy inseguro/a, yo soy poca cosa, yo me siento insuficiente, etc. No te atreverás a hacer cosas afuera, en todo tu entorno porque carecerás de energía para ello, y estarás cada día más en decadencia hacia lo que realmente quieres. Pero cuando dices yo soy fuerte, yo soy amor, yo puedo, yo soy capaz, hará que tu energía cambie, de hecho, deberíamos decirlo hasta creérnoslo, porque así como se refuerza el miedo diciéndolo una y otra vez se refuerza la seguridad, el positivismo y optimismo, ¿Por qué no refuerzas esas palabras positivas? Es ahí cuando solamente entonces la vida cambiará y empezará a tomar la forma de tus palabras y tus percepciones.
¿Si has fracasado te vas a decir que eres un/a fracasado/a? ¿O te vas a decir al menos que lo has intentado y que vas a vivir de nuevo otras experiencias? Piénsalo con detenimiento, ya que en tu palabra está la calidad de tu vida. Si quieres tener un imperio, gobiérnate a ti mismo, observa cómo te hablas y decide reprogramarte si realmente lo quieres o necesitas. Aquí te dejo una frase de un gran psicólogo y filósofo estadounidense llamado William James que dijo “ERES TÚ, CON TU FORMA DE HABLARTE CUANDO TE CAES, EL QUE DETERMINA SI TE CAISTE EN UN BACHE O EN UNA TUMBA”.
Si en algún momento necesitas ayuda puedes entrar en mi página web www.coachnataliabocanegra.es y contactarme sin compromiso o en la nueva vía por la que haré directos, con una gran comunidad donde se acompañará y ayudará de manera grupal en estos procesos un poco complicados de transitar, en Tik Tok natalia_bocsan, sígueme y podrás disfrutar de los Lives.
Gracias lector y buena semana.
