Afirmó el director provincial de Educación, José Manuel Calzado, que la prueba de diagnóstico que el pasado año se realizó a alumnos de tercero de Primaria y que, en aplicación de la LOMCE deberán realizar en mayo próximo también los alumnos de sexto de Primaria "no puede considerarse de ninguna forma una reválida", sino un control que busca valorar el grado de adquisición de los objetivos educativos marcados para este curso en materias como lengua, matemáticas, lengua extranjera y ciencia y tecnología. El pasado mes de mayo se desarrolló a nivel nacional, y también en Melilla la prueba de diagnóstico a los más de 1.100 alumnos que ese año cursaban tercero de Primaria en la ciudad. La prueba se llevaba a cabo atendiendo a lo recogido en la nueva Ley de Educación, la LOMCE que ya se encuentra totalmente implantada el Educación Primaria, así como en buena parte de Secundaria y Bachillerato en la ciudad.
En esta prueba se comprobó el grado de dominio de las destrezas, capacidades y habilidades en expresión y comprensión oral y escrita, cálculo y resolución de problemas en relación con el grado de adquisición de la competencia en comunicación lingüística y de la competencia matemática. Los resultados fueron evaluados por los profesores para establecer, si fuera el caso, algún refuerzo en alguna materia concreta y las conclusiones y notas se trasladaron a las padres.
Es decir, "que no se trató de ninguna reválida", explicó el director provincial de Educación, José Manuel Calzado, que señala que este curso también se realizará la prueba de diagnóstico a los estudiantes de sexto de Primaria, y "tampoco será una reválida". En esta ocasión los jóvenes se someterán a pruebas para comprobar sus competencias en comunicación lingüística (español), en comunicación lingüística (inglés), en matemática, y Competencias básicas en ciencia y tecnología.
Pruebas
"Hay que recordar que las pruebas son orientativas y están totalmente protegidas, en el sentido de que nunca se dijo que sirvieran como prueba para superar una etapa educativa, sino que son controles para que los padres tengan conocimiento del nivel educativo en el que se encuentran sus hijos y cada centro, por separado, tenga constancia del nivel de sus alumnos y sepan qué medidas deben tomar para ir mejorando poco a poco", apostilló el director provincial.
Insistió en señalar que de la misma forma que en este pasado curso la prueba de diagnóstico se realizó a los alumnos de tercero de Primaria, "donde por primera vez los resultados que arrojaron situaron a Melilla dentro de la media de resultados de toda España, este año, en mayo, se hará otra prueba de nivel tanto a los alumnos de tercero como a los de sexto curso, pero no tienen un sentido de reválida". Afirmó que el acceso a los resultados sólo lo tendrán los padres por separado, y los profesores y el claustro, para "saber qué medidas se deben tomar, pero no se publicarán los resultados, porque no es el objetivo. No se trata de un concurso, sino ver la situación en la que está cada alumno".
