Más de la mitad de las preguntas que ayer plantearon los tres grupos de la oposición en el último Pleno de Control al Gobierno de esta legislatura tendrán que esperar unos días más para obtener una respuesta. De las 24 cuestiones que ayer plantearon entre CPM, PSOE y PPL, 13 obtuvieron la misma réplica por parte del Ejecutivo: "Se le contestará por escrito". Esta opción impide que el autor tenga opción a repreguntar o a desarrollar un debate acerca del asunto durante el Pleno de Control, de ahí la indignación que ayer mostraron los tres grupos de la oposición al término de la sesión, que pese a esta agilización terminó cerca de las dos y media, después de cinco horas de un debate marcado por la antesala electoral. Coalición por Melilla, el partido al que más preguntas se le quedaron en el tintero -cinco concretamente-, mostró su enfado al término de la sesión al considerar que dejar de responder de forma oral una pregunta que se formula por esa vía es "ofender a los ciudadanos de Melilla". No en vano, recordó que los diputados son representantes del Pueblo y cuando plantean una pregunta, "es preciso el decoro, la educación y la confianza, porque detrás de la pregunta está el Pueblo de Melilla". El líder de la oposición, Mustafa Aberchán, fue claro al asegurar que respondiendo por escrito como hará el Ejecutivo en cinco de sus preguntas, "se oculta la respuesta" a los ciudadanos "y cuando se hace esto, lo que se está haciendo es decirle al Pueblo de Melilla que le importa bien poco".
El presidente de CPM dijo haber echado en falta una mayor implicación del Gobierno local hacia asuntos que interesan a la ciudadanía, como es el caso de los dos jóvenes melillenses tiroteados por la Marina Real de Marruecos, Emin y Pisly, o la regularización de las viviendas de la Cañada, que fueron los dos temas abordados por los cepemistas en sus interpelaciones.
La conclusión de Aberchán al término del último Pleno de Control es que "estamos peor que hace cuatro años". Y ante ello, opinó que al Gobierno solo caben dos posibilidades: "o reconocer que es incapaz y pedir perdón, o engañar al Pueblo de Melilla". Según el cepemista, la elección del Ejecutivo ha sido la segunda.
Estrategia, según el PSOE
El PSOE, por su parte, también mostró su indignación por no haber encontrado ayer respuesta a cuatro de sus cinco preguntas. Su portavoz, Gregorio Escobar, se mostró convencido de que el Gobierno tenía "una estrategia" para no responder a las preguntas socialistas, y señaló a la vicepresidenta de la Asamblea, Cristina Rivas, de ser "cómplice" de ello "actuando de manera caciquil impidiendo que en un pleno se puedan plantear las cuestiones como se considere oportuno".
Escobar se refería así al rifirrafe más importante que se dio ayer durante el Pleno de Control, que protagonizó él mismo, en el que intentó argumentar una de las preguntas en vez de plantearla de manera "escueta y estricta" como dice el Reglamento de la Asamblea. Previamente ya había recibido dos llamadas al orden y Rivas le advirtió con expulsarle si había una tercera.
