El Consejo de Ministros aprobó ayer el Plan Anual de Política de Empleo 2016, para el que este año se ha destinado una partida de 5.200 millones de euros, habiéndose incrementado la inversión en 477 millones respecto al plan del año anterior. Entre sus objetivos, está el de mejorar la empleabilidad de los colectivos especialmente afectados por el desempleo. Por primera vez, se han incluido a los refugiados como uno de los grupos prioritarios. Durante la reunión del Consejo de Ministros de ayer se aprobó el Plan Anual de Política de Empleo 2016 (PAPE), en el que se incluyen una serie de medidas valoradas en 5.200 millones de euros para tratar de reducir el paro. En esta ocasión, se ha incrementado la inversión en 477 millones de euros respecto al presupuesto del año 2015.
Entre los objetivos del PAPE de este año, está el de mejorar la empleabilidad de los jóvenes y de otros colectivos especialmente afectados por el desempleo, entre los que se incluye por primera vez a los refugiados, según subrayó a través de su cuenta de Twitter la portavoz del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría: “#CMin Plan Anual de Política de Empleo 2016: se incluyen por primera vez a los refugiados como colectivo prioritario”.
Según se estableció, del presupuesto total destinado a crear políticas de empleo, 1.800 millones de euros serán gestionados por las Comunidades Autónomas. Asimismo, el PAPE recoge que la distribución de estos fondos se realizará según la evaluación de los resultados de los indicadores definidos para 2016 en la Conferencia Sectorial de Empleo y Asuntos Laborales en abril de 2016.
