Por Jorge Cuenca/ex secretario general de la Federación Melillense de Fútbol
El miércoles pasado con la intervención del CSD, las jugadoras de la Selección española optaron por aceptar la convocatoria de la seleccionadora. Quiero felicitar a las jugadoras, porque después de la semana que han pasado han demostrado ser grandes profesionales y así lo demostraron en el partido contra Suecia.
No obstante, creo que el problema no se soluciona con echar a presidentes, secretarios, jefes de comunicación, etc., que también, pero el problema de las federaciones de fútbol es mucho más profundo. Es un problema estructural y de organización y no es único del fútbol femenino, sino de todo el fútbol en general y que viene arrastrando desde 30 años atrás. Por eso, creo que es el momento de que el CSD actúe reformando las estructuras actuales totalmente arcaicas y vejatorias.
La base principal de una democracia son las elecciones, pues el pilar más importante en cualquier organización o asociación deportiva es el derecho a elegir a las personas que dirijan nuestro fútbol, pero de forma libre y democrática.
Hoy no se hacen unas elecciones libres, porque la mayor fuerza las tienen las Territoriales, por lo que ninguna persona podrá ser presidente, si no tiene el apoyo de las mismas.
El caso último lo tenemos con el Sr. Casilla, que quiso presentarse a las últimas elecciones y se dio cuenta que todo estaba controlado por el presidente saliente, a través de las Territoriales que controlan los estamentos de clubes, jugadores, entrenadores y árbitros de su región, a los únicos que no controlan son a los clubes y jugadores profesionales.
Por ello y me reitero, el CSD debe cambiar el modelo de elección a las federaciones, dando plena libertad a los distintos estamentos, eligiéndose entre ellos y nombrar a su representante a la asamblea general, y no depender como hasta ahora de las Federaciones Territoriales.
Les aseguro que si no se cambia el sistema electoral, saldrán siempre los mismos, los que quieran las Territoriales, y volveremos a lo de antes y seguirán las mismas personas con los mismos argumentos de gobernanza, que no es otro que sus propios intereses y no el del FÚTBOL.
