Los de Rafa Monclova están obligados a ganar este viernes a un rival directo para no complicarse la vida
Los azulones vencían en el choque de la primera vuelta, disputado el pasado 11 de noviembre en el Polideportivo Municipal de Pumarín, por el resultado de 71-79. En aquel partido, Guille Mulero fue el máximo anotador de los visitantes con 14 puntos, aunque el que tuvo una actuación sobresaliente sería Óscar Alvarado, que repartió 14 asistencias y contabilizó 25 de valoración.
La plantilla del Club Melilla Baloncesto reanudaba este lunes las sesiones de entrenamiento, tras jugar en la tarde del pasado sábado ante el Baloncesto Fuenlabrada y ‘recargar las pilas’ a lo largo del fin de semana. Así pues, los de Rafa Monclova ya preparan el importante compromiso liguero del próximo viernes, en el que recibirán, desde las 20’15 horas, la visita del Alimerka Oviedo Baloncesto, un rival directo en la clasificación. No en vano, los ovetenses, décimos, aventajan en un triunfo a los melillenses, decimoterceros, por lo que el choque, que tendrá como escenario en el Pabellón Javier Imbroda, se convierte en trascendental para ambos equipos, tanto en la lucha por la permanencia como de cara a lograr un billete para los play off de ascenso.
Los azulones no llegan a este duelo en su mejor momento de la temporada, toda vez que han encadenado cuatro derrotas consecutivas, ante el Gipuzkoa Basket, el Leyma Coruña, el Club Ourense Baloncesto y el Baloncesto Fuenlabrada. Tampoco los asturianos están para tirar cohetes, ya que han perdido sus dos últimos partidos, frente al Hestia Menorca y el Tizona Burgos.
