Hasta el próximo 31 de agosto se prolongarán los cuatro cursos que desde el pasado primero de mayo se imparten en la Plaza de Toros bajo la organización de la Consejería de Bienestar Social y la colaboración de la de Medio Ambiente, en los que toman parte cuarenta menores tutelados por la Ciudad. El objetivo de estos talleres es contribuir a la futura inserción laboral de este grupo de chicos y chicas. Los cursos que se imparten son el de albañilería, el de pintura y dos más de guías y azafatas. Según explicó el consejero Daniel Ventura, el pasado 1 de mayo se inauguraron cuatro cursos formativos prelaborales para menores tutelados por la Ciudad Autónoma. Para su desarrollo Bienestar Social ha contado con la implicación de la Consejería de Coordinación y Medio Ambiente, así como de los propios centros de acogida que ha uniformado a los cuarenta jóvenes participantes en estas acciones formativas que imparte, tras superar un concurso, la empresa Sergloform.
Cursos
Cada curso cuenta con un total de diez alumnos, tanto chicos como chicas. El primero, es el de albañilería que incluye conocimientos de fontanería y electricidad, "lo que se entendería como mantenimiento de edificios". El segundo es el de pintura, que incluye competencias de albañilería. El tercero y cuarto son cursos de azafata y azafatos, en resumen, de guías del recinto de la Plaza de Toros. Los dos primeros cursos tienen horario de 9 a 13 horas y los dos de guía, uno tiene horario de mañana y el segundo, de tarde, de 17 a 21 horas.
"El objetivo que buscamos con estos cursos es que los jóvenes aprendan habilidades para realizar este tipo de trabajo cuando sean mayores de edad. Esto repercute en su autoestima y en el hecho de sentirse realizados por estar participando en esta formación y adquiriendo nuevos conocimientos", indicó Daniel Ventura. Otro atractivo es que estos cursos están becados con dos euros al día, lo que es "un aliciente más que hace que vengan con un mayor grado de motivación a aprender".
Destacó el responsable de Servicios Sociales la predisposición de los estudiantes y el hecho de que en tan poco tiempo, a pesar de que antes no había tocado un palustre, "tienen facilidades para adquirir habilidades y los vemos haciendo incluso repellos". Estos cursos tienen un añadido más y es que posibilita la realización de pequeñas reparaciones en la Plaza de Toros.
Agradeció al consejero de Medio Ambiente, Manuel Ángel Quevedo, "su predisposición a la hora de colaborar para que podamos utilizar la plaza de Toros". Estas acciones formativas se prolongarán durante cuatro meses, hasta el 31 de agosto. El presupuesto es de 15.400 euros.
