Casi cuatro meses ha tardado el Gobierno de Melilla en tomar una decisión sobre la situación que había tras el cese de Mohamed Mohand como consejero de Turismo, Emprendimiento y Activación Económica. La cartera, recordemos, la asumió de manera provisional su jefa política, Gloria Rojas, que en este tiempo ha tratado de compaginar la responsabilidad de las dos consejerías sin morir en el intento. Ahora, el Consejo de Gobierno ha acordado repartir las competencias de Turismo, Emprendimiento y Activación Económica en un movimiento en el que Coalición por Melilla se hace más fuerte todavía en el seno de un Gobierno en el que sus competencias no han parado de aumentar.
Ya sucedió hace algo más de un año, cuando Francisco Vizcaíno dimitió como viceconsejero de Recursos Hídricos, Energías Renovables y Políticas Ambientales por la polémica de la autoayuda para la compra de un coche eléctrico. La siguiente de la lista del PSOE, Francisca García Maeso, no ocupó esa viceconsejería, ya que para ella se creó otra de Bienestar Animal y las competencias que tenía el PSOE en el área de Medio Ambiente se las quedó CpM.
La historia se ha vuelto a repetir y, después del cese de Mohamed Mohand, CpM ha dado otro bocado a las competencias que los dos socios de Gobierno se repartieron en la negociación. Al ser comunicado por el BOME y no en una explicación pública a la ciudadanía, como corresponde al tratarse de una remodelación del Gobierno que gestiona el interés general, no sabemos si esta decisión responde a una incapacidad del PSOE para hacer frente a las competencias que tenía asignadas o a un nuevo pulso entre socios en el que CpM sale ganando.
Pero una cosa sí parece clara, y es que, con la supresión de la Consejería de Turismo, el PSOE cierra la puerta a que su diputado Mohamed Mohand pueda volver al Gobierno. El exconsejero seguirá, por lo tanto, siendo el único diputado sin cargo en las bancadas que lo sostienen, ya que hasta el tránsfuga Jesús Delgado tiene uno al frente de Promesa gracias a CpM, que ahora asume, ya de manera oficial, esta sociedad pública en la distribución de competencias acordada en la última remodelación publicada en el BOME este martes.
Detrás de este acuerdo no parece haber una decisión inteligente por parte del PSOE, que se ha ido dejando ganar terreno por CpM poco a poco en estos casi tres años de legislatura y, si en un principio la solución fue que las competencias económicas no fueran para ninguno de los dos socios principales (cuando se las asignaron a Julio Liarte), y después se repartieron entre ambos, ahora, en este tramo final del mandato, en el que el trabajo se enfoca al escaparate electoral, dependen del todo de CpM.
Otra duda razonable es por qué se elimina la Consejería de Turismo cuando el Gobierno defiende que el turismo es una de sus apuestas para reactivar la economía. Eliminar de un plumazo la consejería para dejarla solo en el Patronato, adscrito a Presidencia y Administración Pública, no parece la mejor manera de visibilizar esa prioridad.
