Veía la tele, y mira por donde me encuentro con el inmaduro Maduro despidiéndose de Rajoy entre sonrisas y gestos. Me dije, que le habrá pasado a éste para que sea tan agradable con mi amigo gallego, siendo él un venezolano de los que llaman a los españoles "gallegos"… despectivamente…
… ; sospeché que había gato encerrado. Y curioso yo, indago y mira por donde me encuentro que dentro de la revolución bolivariana se considera al inmaduro como vidente. Pienso yo que quizá le haya tocado la mano del Señor o que a través del Papa le haya trasmitido esa visión de profunda capacidad sensorial y espiritual. Lo que sí queda claro es que es vidente, muestra es que su televisiva despedida de Rajoy ha hecho impacto con un resultado espectacular, ha sido capaz de ver su derrota electoral antes de cumplirse esta.
No sé si Rajoy le agradecerá sus muestras tan efusivas con su "Adiós Rajoy adiós", pienso que el galaico no será tan desconsiderado como para no agradecerle tanto de su afecto, supongo que la sorna gallega se despedirá de él con un ¡Adiós Maduro, adiós!
El resultado es que, a Iglesias el de Podemos, le ha salido un grano y a su Monedero dos. Qué dirán ahora de la reacción bolivariana a tantos años de nefasta política. Dirán que las fuerzas reaccionarias han manejado el voto venezolano llevándoles a votar de la mano… Son capaces y más.
Hay un dicho que dice que, "Dios castiga sin palo ni piedra”. La razón vuelve a su cauce gracias al espíritu de la experiencia. Otra cosa es que, haya que devolver lo que es de Dios (el trabajador) a Dios y lo que es del César (la economía) reducirle beneficios.
Amén.
