Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

“Abandono” del Estado, “brecha digital” y aulas “saturadas”: Melilla ‘vuelve a suspender’ en el Informe PISA

Colegio

“Aunque lo lamentamos, no nos coge de sorpresa”, admiten los principales sindicatos educativos de la ciudad ante los malos resultados que han cosechado los alumnos melillenses en el último Informe PISA, los peores, junto con Ceuta, de toda España

 

“Nos lo temíamos”.

Con esta demoledora frase resume el presidente del sector de Enseñanzas de CSIF Melilla, Luis Escobar, los malos resultados que han obtenido los alumnos melillenses, junto con los de Ceuta, en el último Informe del Programa para la Evaluación Integral de Alumnos (PISA) 2022, publicado este martes, y que ha dejado a ambas ciudades autónomas a la cola en lo referente al éxito y rendimiento académico en España.

En concreto, los alumnos de Melilla han obtenido una puntuación de 404 en Matemáticas, por debajo de la media nacional (473), mientras que en Lectura, la media se sitúa en 474 puntos y los melillenses han obtenido 405. En Ciencias, los alumnos de nuestra ciudad han logrado 414 puntos, por debajo de los 485 de media nacional.

El informe destaca que los alumnos de Castilla y León son los que mejores resultados han obtenido de toda España, mientras que los estudiantes de Ceuta son los que peor puntuación han conseguido en las tres materias.

Un panorama para nada halagüeño que, a juicio de Escobar, refleja el “abandono” del Ministerio de Educación con respecto a Ceuta y Melilla en particular, y en España “en general, haciendo cada comunidad autónoma de su capa un sayo”.

“Y esto se demuestra en las enormes diferencias que hay entre comunidades, con hasta 100 puntos de diferencias entre las comunidades más fuertes en una disciplina y menos fuertes, como nosotros, en otra”, argumenta al MELILLA HOY, lamentando que la educación en España «no tiene un rumbo, una guía, un referente y no se toma como política de Estado». Algo que, en su opinión, se refleja en la gestión que realiza el Ministerio que dirige la socialista Pilar Alegría en “los únicos territorios de los que es responsable: Ceuta y Melilla”.

“Esto es una auténtica vergüenza para el Ministerio en general”, remarca Escobar, señalando que esta situación “no es nueva”, sino que se remonta a hace “muchos años”. “Y no se puede achacar esto a la pandemia”, deja claro.

“Aulas saturadas y brecha digital”

Ese “abandono” por parte del Estado desde hace muchos años hacia la Educación en ambas ciudades autónomas también lo comparte José Luis López Belmonte, miembro de SATE-STEs, quien, en conversación con este Diario, achaca también los malos resultados del Informe PISA en Melilla a “las aulas saturadas” que existen en muchos centros educativos de la ciudad, aunque reconoce que “ha mejorado” en los últimos años, pero “no lo suficientemente”.

Ya no habrá el 90% de las aulas ilegales, de las que sobrepasan el número máximo permitido por la ley, pero seguimos estando muy alejados de los veinte y pico alumnos de media en Infantil y Primaria que existe en el resto de los países de España”, explica López Belmonte, que denuncia que Melilla ha estado “excesivo tiempo abandonada por muchos gobiernos”. “Y eso es lo que refleja”, concluye.

No obstante, lo que más le llama la atención es que Melilla ha sufrido una baja “muy significativa” con respecto a años anteriores en las tres asignaturas anteriormente mencionadas: 25 puntos menos en Ciencias, 28 en Matemáticas y 33 en Lecturas. Unos datos que vienen a certificar la importancia de la figura del profesor en la enseñanza.

“No se puede reemplazar a un profesor por un software. Eso no funciona”, deja claro, subrayando que el profesor sigue siendo ”fundamental” en los centros educativos.

A estos factores, Belmonte añade la “brecha digital, reflejo de la brecha social” existente en Melilla, así como por el Índice Económico y Social de los Padres. “A todos les supuso un gran déficit el no contar con las clases presenciales (durante la pandemia del covid-19) y tener que basarse en temas informáticos, pero hay un sector de la población muy alto en Melilla que su capacidad de tener aparatos informáticos y conocimientos del manejo de esos aparatos es muy bajo”, apunta, señalando que “eso lo soportan de mejor manera las familias” que tienen una “mejor formación, trabajo, casa y equipos informáticos”.

“El déficit viene basado en esas dos situaciones: las aulas saturadas y la brecha digital”, resume.

Pacto para “vertebrar” el sistema educativo

Uno de los puntos más significativos que se han extraído del último Informe PISA, aparte de los malos resultados obtenidos a nivel nacional, es la ‘brecha’ existente entre diferentes comunidades autónomas, “uno de los puntos débiles del sistema educativo español”, según el sindicato ANPE, que insta a fraguar un pacto educativo que “vertebre” el sistema y lo robustezca y fomente un modelo pedagógico que ponga en valor la formación profesional.

“Es imprescindible apostar decididamente por la calidad de la enseñanza pública mediante el aumento de la inversión, de forma que se asegure la adecuada dotación de medios y recursos tanto personales como materiales”, reclama el sindicato, que subraya que la atención al profesorado debe ser “prioritaria y que resulta imprescindible legislar un estatuto docente que contemple sus derechos y deberes, su valoración y dignificación ante la sociedad, y una verdadera carrera profesional que haga la docencia más atractiva y motivadora”.

Más medidas

La figura del profesor es, sin duda alguna, el gran elemento que ensalzan los sindicatos para poder revertir este desolador panorama.

Es por eso por lo que la Federación de Enseñanza de Melilla (FEUSO) vuelve a reclamar “más medidas para mejorar y prestigiar el trabajo de los docentes”.

Según recoge este sindicato de denuncias de profesores y profesores, en los últimos años se está poniendo el acento en “cuestiones colaterales que, en muchos casos, impiden que el profesorado pueda centrarse en su auténtica actividad docente”. “No se han adoptado medidas eficaces para reducir el exceso de burocracia (asunto muy preocupante en la actualidad), ni para rebajar los casos de bullying, ni tampoco para combatir el empeoramiento del clima escolar, ni para poner algo de sentido común en el uso de dispositivos móviles”, enumera el sindicato, que lamenta que, al final, el profesorado “debe asumir tantas responsabilidades que la atención del alumnado y a sus necesidades educativas puede quedar en un segundo plano”.

Loading

Miguel Rivas

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€