El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha confirmado la expulsión del Ejército de un soldado perteneciente al Grupo de Regulares de Melilla que fue condenado a ocho meses de prisión por la Sala de lo Militar del Tribunal Supremo por abofetear y dar un codazo a un teniente en un bar de la ciudad autónoma.
Según ha informado el Diario de Sevilla, a pesar de que el soldado recurrió en 2023 por la vía contenciosa “la resolución de compromiso del militar” que dictaminó el Ministerio de Defensa, que significaba su salida del Ejército, finalmente el Alto Tribunal andaluz ha respaldado el informe de la general auditora de la asesoría jurídica del Ejército que califica como “grave el delito cometido y la pena impuesta» al soldado por su acción, “por lo que no podemos compartir, como se dice en la demanda, que los hechos no produjeron ningún perjuicio a las Fuerzas Armadas»”.
Origen del caso
El origen del caso se remonta, según el diario hispalense, al 21 de octubre de 2021, cuando el teniente, en un tono jocoso, intentó bromear con dos soldados con los que tenía confianza en un conocido bar de la localidad norteafricana. Sin embargo, el citado soldado se sintió disconforme con uno de los comentarios del teniente respondiéndole bruscamente: “Te meto un guantazo que te embarco».
Sorprendido por el comentario furibundo del soldado, el teniente, prosigue el diario, intentó en reiteradas ocasiones y de forma mesurada conversar con el soldado que, resistente, terminó por propinarle una «fuerte bofetada en la cara con la mano abierta». En ese momento, los compañeros del regular lo separaron y se marchó del establecimiento por indicación del dueño del local ante la presencia de un público numeroso que presenció el incidente.
