Y viendo lo que nos está hoy costando a la sociedad salir adelante, no sabemos que será mejor… En principio, fabricar en España, luego equilibrar la balanza de pagos ante importaciones indiscriminadas por la liberalidad comercial establecida, cerrar las fronteras como se debe de hacer, previo reconocimiento del individuo y su pasaporte, negociar o salirse de Maastricht con lo que conlleve ante la Unión Europea. Y si hace falta, imponer la peseta, una vez se recupere el oro mal vendido y algo más. Aunque nos costase Dios y ayuda.
Y encima nos pide EE.UU autorización para la estancia de su personal al regreso de sus actividad en Liberia y al alrededores, por la enfermedad del ébola. Lo curioso es que por su amistad con Marruecos, podía haberles pedido su paso o aterrizaje en el Sahara. Y actuar con una de las plataformas petroleras como puente entre el Sahara y EE.UU, como hicieron en su día con los emigrantes en cuarentena en su isla de Manhattan, en vez de Canarias o Rota, poniendo a esas zonas de España, en riesgo, dado el carácter muy excepcional de la citada enfermedad (que sobrepasa la legalidad vigente), sin experiencia medica suficiente, ni una farmacopea eficiente en vacunas, antivirales y tratamientos experimentados.
Da la impresión de que somos el pito del sereno que, todo el mundo lo toca. Y que todo quede ahí…
