La diputada local del PP y exconsejera de Salud Pública, Paz Velázquez, afirmó ayer que el superintendente de la Policía Local, Luis Miguel Palacios, pidió hasta en tres ocasiones por escrito a la Ciudad Autónoma más personal para reforzar el servicio de laceros, sin que la Administración local diera una respuesta satisfactoria al respecto. En un mensaje grabado, Velázquez explicó que el superintendente así lo expuso en la comisión urgente celebrada este jueves para abordar el problema de la rabia, en la que “ha dejado en evidencia” a la consejera de Presidencia y Administración Pública, Gloria Rojas, por este asunto.
Según Velázquez, el jefe de la Policía Local también puso de relieve que se ha denegado a Seguridad Ciudadana el pago de las horas extra realizadas por el único lacero que tiene de servicio la Ciudad Autónoma, cuando ha trabajado fuera de horario, teniendo Melilla decretado el nivel 1 de alerta de rabia.
La diputada popular cree que el presidente de la Ciudad Autónoma, Eduardo de Castro, “tiene muchísimo que decir” en este sentido porque es responsable de Seguridad Ciudadana y es responsable del servicio de lacero, pero “ni está ni se le espera” y “la crítica que se le puede hacer es que no ha reforzado en tres años ese servicio deficitario y precario”.
“Falta de claridad”
Sobre las explicaciones de la consejera de Política Social, Salud Pública y Bienestar Animal, Paqui Maeso, Velázquez criticó que no haya “sabido explicar” cómo, ni cuándo ni de qué manera se va a empezar a trabajar con la empresa pública del Ministerio de Agricultura para atajar la presencia de manadas de perros en las calles.
La conclusión a la que llega la diputada del PP debido a “esa falta de claridad” es que “esa retirada de animales se va a producir para, posteriormente, sacrificarlos”, de lo que responsabilizó a la propia Maeso por “una tardía decisión que le ha llevado a esa radicalidad en esta decisión”.
Asimismo, acusó a la consejera de inoperancia y “cambio de rumbo” en su “política animalista”, ya que recordó que “ella llegó al cargo enarbolando la bandera de sacrificio cero” y “se ha dado cuenta de la cruda realidad” que hay en Melilla por “un problema endémico como es la rabia”.
“La crisis le ha estallado en la cara”, dijo Velázquez, según la cual el PSOE no ha tenido argumentos para explicar por qué no se ha convocado en cuatro meses esta comisión.
