El Juzgado de lo Penal número 2 celebró ayer un juicio en el un hombre estaba imputado por un delito de lesiones. Presuntamente, éste habría agredido a su sobrina en la vivienda en la que convivían. Según la versión del acusado, en realidad fue la joven quien le agredió a él, ya que éste había denunciado anteriormente al padre de ella, que a su vez es su hermano. “Ella se abalanzó sobre mí y empezó a arañarme”, relató.
La presunta perjudicada ofreció una versión opuesta de los hechos. Aseguró que su tío se acercó al dormitorio en el que estaba con su hermana con la intención de cambiar la cerradura a la puerta. Ante la reacción de protesta de la sobrina, el individuo comenzó a agredirle presuntamente. “Me abofeteó en la cara, me cogió de los pelos y me estampó contra la pared”.
La hermana de la presunta víctima declaró como testigo, apoyando su versión. Por otro lado, testificaron los agentes de la Policía Nacional que acudieron aquella noche a la vivienda familiar y coincidieron al señalar que la chica tenía los pelos de la cabeza alborotados y que estaba llorando cuando llegaron. El testigo perito también remitió al parte médico de la presunta víctima, en el que se expone que presentaba la cara inflamada.
Con todo, la Fiscalía solicitó la pena de 9 meses de prisión para el acusado, pero al no tener antecedentes suspendió la pena durante el periodo de dos años. No obstante, reclamó la responsabilidad civil de 60 euros para la sobrina. La juez tendrá que decidir.
