El suceso se produjo a las 23.50 horas del pasado miércoles y aunque desde la calle a simple vista parece que los daños empiezan en la tercera planta, el parte de los Bomberos refleja que se han visto afectadas cinco de las seis plantas del edificio, concretamente desde la segunda hasta la sexta planta. En total se ha quedado sin revestimiento una superficie de aproximadamente 550 metros cuadrados, ya que el tramo afectado es de 30 por 18 metros. Una docena de viviendas de protección oficial tuvieron que ser desalojadas por los Bomberos, que se personaron en el lugar con cuatro dotaciones, en concreto dos camiones autobomba y dos vehículos auxiliares, además de varias patrullas de la Policía Local y Nacional. El desprendimiento causó un enorme estruendo y una considerable polvareda blanca en mitad de la noche. Prácticamente todo el vecindario se echó a la calle sobresaltado.