Es lo más parecido a la política nacional, ha entrado la carcoma separatista royendo poco a poco, y ahora esperamos a que con un spray de insecticida (U. E) podamos darle solución. Todo es, porque la burguesía choricera quiere tapar su vergüenza económica y de otras tapaderas paradisiacas con lo bonito de una independencia racista, para colmo, de su propia raza; y aquí no cabe lo étnico. Y no se da cuenta esta burguesía engolada de sí misma que, ellos están en España y no en
Sudamérica. El problema es que estos descerebrados siguen jugando a lo fácil y no ¿se dan cuenta? de que, todo tiene un límite. Ese límite que ellos temen y que a su vez ven como descubrimiento de sus engaños a los españoles y sobre todo a los que son de y viven en Cataluña. Lo que no podemos es caer en la trampa de tanto humanismo confundido que como logia es yedra en la unidad de España, la envuelvan con papel de seda o de estraza. Y claro está que, les hará falta un fondo económico para una suigéneris moneda avalada por… ¡ojo! No se puede ceder ni un milímetro en lo que va contra natura, ni hacer una maniobra a lo Solbes.
Pero además, ahora, tenemos que lidiar con la frontera, no solo con el paso de mercancías, con los kamikaze, con los porteadores marroquíes, con los negocios ávidos de euros aunque no y claro, cómo no, con los que se rasgan las vestiduras engolados desde su cerebro de verse ellos ¡redentores!estén debidamente escriturados o no, y para colmo, no tenemos suficiente con el asunto subsahariano sino que las protestas sociales de Alhucemas las quieren convertir en derechos de ¡refugiados políticos!, como si no tuviéramos bastante con lo de Amín y Pisly en asuntos marítimos exteriores. Hay un hecho claro, no podemos por etnia complicarnos nosotros mismos lo que es socialmente de todos los melillenses; y digo melillenses por no excluir de lo nacional a los que no piensan como España. Ni tampoco por “morados” políticos (si es que eso es tener la consideración de político) complicar la frontera por demagogia y compañía de la mano de las mañas étnico económicas de algunos más interesados en aquello de “A río revuelto ganancia de pescadores”, teniendo en cuenta que Melilla es un todo español, demasiado permisible, pero un todo.
Otra cosa es interpretar que la OPE esté por encima del paso fronterizo económico social. Si comparamos los resultados económicos de las mercancías y sus aforos etc., con lo que deja la OPE veremos que lo único que nos deja son complicaciones para Melilla. En cuanto a turismo, díganme qué resultados tenemos, si unos y otros llegan con la botella de agua en la mano o las naranjas en el “maletero”, gastando en Melilla menos que un ciego en novelas. Por supuesto que dejan derechos de embarque, beneficios a la naviera con lo que se puede permitirse el lujo de “todo a Cero”, compensando así los posibles gastos de la Ciudad. Pero lo que genera de continuo la supervivencia son los aforos y esto hay que amoldarlo a los pasos fronterizos. Está claro que todos queremos más, pero para restringir hay que hacerlo con “duchos” en la materia y no creo que las medidas tomadas hayan sido sin sopesar los intereses generales de los melillenses; más aún, conociendo la carrera de los diferentes gobiernos de Melilla.
Mientras tanto otros que, lucen de derechos sociales nacionales entre los que está el derecho social de la fe o las creencias recogidas en la Constitución discriminan a la sociedad mayoritaria en España (el Cristianismo) y debieran de estar promoviendo y sobre todo firmando un apercibimiento y bloqueo a la película que nos dicen, (Corpus Christi- El Cuerpo de Cristo) que muestra desde tal libertaria mentalidad, a Cristo y discípulos, como un clan de homosexuales ¿A lo Chueca? ¿A lo Hebbo? Luego dirán, si pasase algo, que somos unos retrógrados en causa de religión y sociedad. Lo curioso es que dicen tienen el visto bueno del gobierno…¿?
