La Ciudad Autónoma de Melilla llevará a cabo un “rastreo especial” para controlar que los casos positivos de coronavirus cumplen el aislamiento domiciliario y no salen de sus casas hasta que reciban el alta médica, después de detectar que algunos de ellos se están saltando la cuarentena.
La vicepresidenta primera de la Ciudad Autónoma y coordinadora de la gestión de la pandemia, Gloria Rojas, anunció ayer esta medida, que se va a aplicar mediante un aumento del personal dedicado al rastreo de casos positivos y con un sistema de control en las casas, sobre el que no quiso dar detalles.
Si los pacientes que deben quedarse aislados en casa no son localizados en sus domicilios, Rojas indicó que se dará cuenta a los cuerpos de seguridad para que se les aplique la sanción correspondiente, aunque el objetivo es evitar que salgan, como está sucediendo en algunos casos, dado “el peligro que supone”.
El Gobierno regional carece de los datos exactos de personas que se han saltado la cuarentena, pero Rojas indicó que quienes han sido detectados han salido de sus casas pese a ser casos positivos de coronavirus lo han hecho, fundamentalmente, para ir a hacer la compra.
Rojas expresó la preocupación del Gobierno melillense por estos hechos y avanzó que este rastreo especial se pondrá en marcha en breve, al tiempo que lanzó un “mensaje de serenidad” a toda la ciudadanía, a la que aseguró que se está trabajando de manera coordinada, conjunta y consensuada ante la situación actual.
