Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

Óxido Nitroso. ¿Nueva droga?

Por: Francisco J. Céspedes Pérez. Subinspector de la Policía Local de Melilla. Criminólogo

De un tiempo a esta parte hemos podido observar en algunas zonas de la ciudad una serie de botellitas o ampollas metálicas esparcidas por el suelo, principalmente se encuentran en aquellos lugares donde se realizan los botellones. Pues bien, lo que contenían esas botellitas era óxido nitroso (NO2). Se trata de la nueva droga de moda entre los más jóvenes debido a su fácil adquisición y al precio de la misma. Los distribuidores oficiales pueden vender el producto en un precio que oscila entre los 50 y los 80 céntimos, y los vendedores “de calle” entre 3 y 5 euros.

El óxido nitroso o gas de la risa como es conocido se utiliza como anestésico local mezclado con oxígeno para pequeñas intervenciones quirúrgicas o también como sedante. Además, tiene su uso en cocina como agente espumante de la crema batida.

Según el Registro Estatal de Emisiones y Fuentes Contaminantes (PRTR-España) se trata de un gas volátil, incoloro, de olor dulce y ligeramente tóxico, que provoca alucinaciones en la persona, por lo que últimamente está siendo utilizado como droga en algunos casos. Además, hay que tener en cuenta que potencia los efectos hipnóticos de los anestésicos intravenosos o por inhalación entre ellos los benzodiacepinas o morfínicos, incluso puede producir estos efectos con el alcohol, ya que se trata de un depresor del sistema nervioso central. En junio de 2011, el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses elaboró un estudio sobre los efectos adversos del uso recreativo del óxido nitroso encontrando que produce un déficit de vitamina B12 que puede generar problemas a la médula espinal. Además, puede causar «delirio subagudo, leucopenia, trombopenia y anemia megaloblástica grave, así como enfisema intersticial, neumomediastino y asfixia». concluye que «el óxido nitroso inhalado y con fines recreativos supone un riesgo para la salud».  En dicho estudio se concluye que inhalado y con fines recreativos constituye un riesgo para la salud.

Otros riesgos directos del uso de este gas es que puede producir quemaduras en labios, boca, incluso en pulmones, debido a su baja temperatura al salir de su recipiente, por lo que normalmente se introduce primero en globos para bajar la misma, antes de su inhalación. Su actuación en el cuerpo humano al inhalarlo directamente consiste en sustituir al oxigeno de los pulmones, dificultando o incluso no permitiendo la respiración mientras duran sus efectos. En dosis elevada puede producir asfixia.

En el principado de Asturias la Fiscalía Antidroga del Principado abrió una investigación a finales del 2011 debido a la proliferación del uso de este gas en los locales de ocio de Gijón y Avilés. Se solicitó informa a la Inspección Farmacéutica de la Delegación del Gobierno del Principado de Asturias y al Instituto de Medicina Legal sobre el peligro que conllevaba este consumo directo por parte de las personas. En el informe se señalaba que este gas constituía un depresor del sistema nervioso central y que en caso de sobredosis podía producir asfixia por la privación de oxígeno en el organismo. Como resultado de todas estas actuaciones y en colaboración con el propio Principado, se creo la Ley 4/2015, de 6 de marzo, de atención integral en materia de drogas y bebidas alcohólicas, donde se incluya al óxido nitroso como droga y se prohibía la venta, dispensación y la publicidad para el consumo por inhalación de óxido nitroso (ON2).

Aunque la venta al público de este producto para uso profesional no está prohibida, sí se podría incurrir en responsabilidad si se distribuye para uso lúdico en personas. De hecho, ya se han producido condenas por la venta y distribución del Óxido Nitroso a propietarios y encargados de locales de ocio por la venta de globos conteniendo este gas. Así la sección segunda de la Audiencia Provincial de Asturias confirmó la pena de seis meses de prisión al propietario, el encargado y a dos empleados de una discoteca de Oviedo por un delito contra la salud pública, la sentencia de la audiencia incide en que “cabe calificar el óxido nitroso como una sustancia nociva para la salud cuándo es inhalada, quedando comprendida la conducta de su venta o comercialización para ser aspirada en el artículo 363.4 del código penal”. En Ibiza hace apenas tres años un hombre fue condenado a cuatro meses de prisión y 720 € de multa por el juzgado de instrucción número 3 de esa localidad por vender óxido nitroso en la vía pública. Al encausado se le encontró en su poder 12 cápsulas de óxido nitroso, un dispensador y 25 globos, así como diversa cantidad de dinero en metálico. En esta ocasión el juzgado número 3 condenó al vendedor como autor de un delito contra la salud pública por comercializar sustancias nocivas, en consonancia al artículo 359 de nuestro código penal.

Loading

Redacción

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€