Mere Hermoso, entrenador de la U.D. Melilla, lamentó la derrota sufrida ante el C.F. Talavera de la Reina en un partido que su equipo tenía controlado hasta la polémica expulsión de Armando Corbalán, una decisión que, en su opinión, cambió el rumbo del encuentro, así como la de un riguroso penalti.
El técnico del Melilla explicó que, aunque el Talavera comenzó dominando, su equipo fue ajustando el ritmo del partido a medida que avanzaba, especialmente gracias al control del balón. «El Talavera arrancó mejor, pero poco a poco fuimos tomando el pulso al partido, sobre todo a través de la posesión», comentó.
De igual modo, aseguró que el Melilla podía hacerle daño al Talavera de la Reina “si le atacaba”, aunque también “podíamos sufrir si el conjunto local conseguía la posesión del balón, así como en las posibilidades de atacar nuestra portería”.
Sin embargo, afirmó que todo cambió en la segunda mitad con la expulsión de Corbalán. «Justo cuando mejor estábamos, llegó la acción que lo cambió todo. Tras la expulsión, el partido tomó un giro completamente distinto. El Talavera controló el balón y nosotros nos vimos obligados a defender hasta que llegó esa acción que habría que revisarla, así como la de la expulsión”.
A pesar del 1-0, Hermoso valoró la actitud de su equipo, que intentó buscar el empate hasta el final. «Lo hemos intentado en todo momento, pero nos enfrentábamos a un buen rival que, aunque nos generó pocas ocasiones, supo aprovechar el penalti y la expulsión, que fueron decisivas».
